T R A S L A T E - Traducir esta Pagina

(dijo el Señor Jesús) “Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán... En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo”. (Juan 15:20 y 16:33)
“Que nadie se inquiete por estas tribulaciones; porque vosotros mismos sabéis que para esto estamos puestos. Porque también estando con vosotros, os predecíamos que íbamos a pasar tribulaciones, como ha acontecido y sabéis”. (1 Tesalonicenses 3:34)

Leer la Biblia en 1 Tesalonicenses 3:1-10

 Dos veces Satanás impidió que Pablo volviera a Tesalónica. Dios permitió esa situación para que fueran manifestados tanto los afectos del apóstol como la fidelidad de los tesalonicenses.  Entonces “el tentador, utilizando otra arma, había suscitado contra ellos grandes tribulaciones. Pablo les había advertido que no sólo esas pruebas eran inevitables sino que para esto estaban puestos.  Por esa razón, ¿permanecía él indiferente? ¡Muy al contrario! Pero lo que le preocupaba no eran las tribulaciones de los tesalonicenses, sino la firmeza de la fe de ellos. ¡Qué lección para nosotros, que nos detenemos fácilmente ante circunstancias exteriores, dificultades materiales, enfermedades, etc., y perdemos de vista el estado interior del creyente! “No pudiendo aveces, soportarlo más”, el apóstol había encomendado a Timoteo que los fortaleciese y animase. Y ahora él mismo había sido consolado y regocijado en medio de su propia tribulación por medio de las noticias recibidas.  Porque esas tribulaciones, lejos de quebrantar la fe de esos creyentes, muy jóvenes todavía, la prueba los había fortalecido, del mismo modo, los climas más rudos generalmente forjan las razas más resistentes. Una vez más, Satanás había hecho una obra engañosa para sí, según Proverbios 11:18: “El inicuo adquiere para sí una ganancia engañosa”.-

Saludo con la Paz de nuestro Señor Jesucristo





LECTURA BÍBLICA DE HOY
La Biblia en un Año.-


Capítulo 4


El ministerio de los apóstoles  


1ºCor.4:1 Así, pues, téngannos los hombres por servidores de Cristo, y administradores de los misterios de Dios.  
1ºCor.4:2 Ahora bien, se requiere de los administradores, que cada uno sea hallado fiel.  
1ºCor.4:3 Yo en muy poco tengo el ser juzgado por vosotros, o por tribunal humano; y ni aun yo me juzgo a mí mismo.  
1ºCor.4:4 Porque aunque de nada tengo mala conciencia, no por eso soy justificado; pero el que me juzga es el Señor.  
1ºCor.4:5 Así que, no juzguéis nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual aclarará también lo oculto de las tinieblas, y manifestará las intenciones de los corazones; y entonces cada uno recibirá su alabanza de Dios.  
1ºCor.4:6 Pero esto, hermanos, lo he presentado como ejemplo en mí y en Apolos por amor de vosotros, para que en nosotros aprendáis a no pensar más de lo que está escrito, no sea que por causa de uno, os envanezcáis unos contra otros.  
1ºCor.4:7 Porque ¿quién te distingue? ¿o qué tienes que no hayas recibido? Y si lo recibiste, ¿por qué te glorías como si no lo hubieras recibido?  
1ºCor.4:8 Ya estáis saciados, ya estáis ricos, sin nosotros reináis. ¡Y ojalá reinaseis, para que nosotros reinásemos también juntamente con vosotros!  
1ºCor.4:9 Porque según pienso, Dios nos ha exhibido a nosotros los apóstoles como postreros, como a sentenciados a muerte; pues hemos llegado a ser espectáculo al mundo, a los ángeles y a los hombres.  
1ºCor.4:10 Nosotros somos insensatos por amor de Cristo, mas vosotros prudentes en Cristo; nosotros débiles, mas vosotros fuertes; vosotros honorables, mas nosotros despreciados.  
1ºCor.4:11 Hasta esta hora padecemos hambre, tenemos sed, estamos desnudos, somos abofeteados, y no tenemos morada fija.  
1ºCor.4:12 Nos fatigamos trabajando con nuestras propias manos; nos maldicen, y bendecimos; padecemos persecución, y la soportamos.  
1ºCor.4:13 Nos difaman, y rogamos; hemos venido a ser hasta ahora como la escoria del mundo, el desecho de todos.  
1ºCor.4:14 No escribo esto para avergonzaros, sino para amonestaros como a hijos míos amados.  
1ºCor.4:15 Porque aunque tengáis diez mil ayos en Cristo, no tendréis muchos padres; pues en Cristo Jesús yo os engendré por medio del evangelio.  
1ºCor.4:16 Por tanto, os ruego que me imitéis.
1ºCor.4:17 Por esto mismo os he enviado a Timoteo, que es mi hijo amado y fiel en el Señor, el cual os recordará mi proceder en Cristo, de la manera que enseño en todas partes y en todas las iglesias.  
1ºCor.4:18 Mas algunos están envanecidos, como si yo nunca hubiese de ir a vosotros.  
1ºCor.4:19 Pero iré pronto a vosotros, si el Señor quiere, y conoceré, no las palabras, sino el poder de los que andan envanecidos.  
1ºCor.4:20 Porque el reino de Dios no consiste en palabras, sino en poder.  
1ºCor.4:21 ¿Qué queréis? ¿Iré a vosotros con vara, o con amor y espíritu de mansedumbre?  


Capítulo 17


Elías predice la sequía  


1°Rey.17:1 Entonces Elías tisbita, que era de los moradores de Galaad, dijo a Acab: Vive Jehová Dios de Israel, en cuya presencia estoy, que no habrá lluvia ni rocío en estos años, sino por mi palabra.
1°Rey.17:2 Y vino a él palabra de Jehová, diciendo:  
1°Rey.17:3 Apártate de aquí, y vuélvete al oriente, y escóndete en el arroyo de Querit, que está frente al Jordán.  
1°Rey.17:4 Beberás del arroyo; y yo he mandado a los cuervos que te den allí de comer.  
1°Rey.17:5 Y él fue e hizo conforme a la palabra de Jehová; pues se fue y vivió junto al arroyo de Querit, que está frente al Jordán.  
1°Rey.17:6 Y los cuervos le traían pan y carne por la mañana, y pan y carne por la tarde; y bebía del arroyo.
1°Rey.17:7 Pasados algunos días, se secó el arroyo, porque no había llovido sobre la tierra.  


Elías y la viuda de Sarepta  


1°Rey.17:8 Vino luego a él palabra de Jehová, diciendo:  
1°Rey.17:9 Levántate, vete a Sarepta de Sidón, y mora allí; he aquí yo he dado orden allí a una mujer viuda que te sustente.  
1°Rey.17:10 Entonces él se levantó y se fue a Sarepta. Y cuando llegó a la puerta de la ciudad, he aquí una mujer viuda que estaba allí recogiendo leña; y él la llamó, y le dijo: Te ruego que me traigas un poco de agua en un vaso, para que beba.  
1°Rey.17:11 Y yendo ella para traérsela, él la volvió a llamar, y le dijo: Te ruego que me traigas también un bocado de pan en tu mano.  
1°Rey.17:12 Y ella respondió: Vive Jehová tu Dios, que no tengo pan cocido; solamente un puñado de harina tengo en la tinaja, y un poco de aceite en una vasija; y ahora recogía dos leños, para entrar y prepararlo para mí y para mi hijo, para que lo comamos, y nos dejemos morir.
1°Rey.17:13 Elías le dijo: No tengas temor; ve, haz como has dicho; pero hazme a mí primero de ello una pequeña torta cocida debajo de la ceniza, y tráemela; y después harás para ti y para tu hijo.  
1°Rey.17:14 Porque Jehová Dios de Israel ha dicho así: La harina de la tinaja no escaseará, ni el aceite de la vasija disminuirá, hasta el día en que Jehová haga llover sobre la faz de la tierra.  
1°Rey.17:15 Entonces ella fue e hizo como le dijo Elías; y comió él, y ella, y su casa, muchos días.  
1°Rey.17:16 Y la harina de la tinaja no escaseó, ni el aceite de la vasija menguó, conforme a la palabra que Jehová había dicho por Elías.  
1°Rey.17:17 Después de estas cosas aconteció que cayó enfermo el hijo del ama de la casa; y la enfermedad fue tan grave que no quedó en él aliento.  
1°Rey.17:18 Y ella dijo a Elías: ¿Qué tengo yo contigo, varón de Dios? ¿Has venido a mí para traer a memoria mis iniquidades, y para hacer morir a mi hijo?  
1°Rey.17:19 El le dijo: Dame acá tu hijo. Entonces él lo tomó de su regazo, y lo llevó al aposento donde él estaba, y lo puso sobre su cama.  
1°Rey.17:20 Y clamando a Jehová, dijo: Jehová Dios mío, ¿aun a la viuda en cuya casa estoy hospedado has afligido, haciéndole morir su hijo?  
1°Rey.17:21 Y se tendió sobre el niño tres veces, y clamó a Jehová y dijo: Jehová Dios mío, te ruego que hagas volver el alma de este niño a él.  
1°Rey.17:22 Y Jehová oyó la voz de Elías, y el alma del niño volvió a él, y revivió.  
1°Rey.17:23 Tomando luego Elías al niño, lo trajo del aposento a la casa, y lo dio a su madre, y le dijo Elías: Mira, tu hijo vive.  
1°Rey.17:24 Entonces la mujer dijo a Elías: Ahora conozco que tú eres varón de Dios, y que la palabra de Jehová es verdad en tu boca.


AMÓS


Capítulo 1


Juicios contra las naciones vecinas  


Am.1:1 Las palabras de Amós, que fue uno de los pastores de Tecoa, que profetizó acerca de Israel en días de Uzías rey de Judá y en días de Jeroboam hijo de Joás, rey de Israel, dos años antes del terremoto.  
Am.1:2 Dijo: Jehová rugirá desde Sion, y dará su voz desde Jerusalén, y los campos de los pastores se enlutarán, y se secará la cumbre del Carmelo.  
Am.1:3 Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de Damasco, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque trillaron a Galaad con trillos de hierro.  
Am.1:4 Prenderé fuego en la casa de Hazael, y consumirá los palacios de Ben-adad.  
Am.1:5 Y quebraré los cerrojos de Damasco, y destruiré a los moradores del valle de Avén, y los gobernadores de Bet-edén; y el pueblo de Siria será transportado a Kir, dice Jehová.  
Am.1:6 Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de Gaza, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque llevó cautivo a todo un pueblo para entregarlo a Edom.  
Am.1:7 Prenderé fuego en el muro de Gaza, y consumirá sus palacios.  
Am.1:8 Y destruiré a los moradores de Asdod, y a los gobernadores de Ascalón; y volveré mi mano contra Ecrón, y el resto de los filisteos perecerá, ha dicho Jehová el Señor.  
Am.1:9 Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de Tiro, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque entregaron a todo un pueblo cautivo a Edom, y no se acordaron del pacto de hermanos.  
Am.1:10 Prenderé fuego en el muro de Tiro, y consumirá sus palacios.  
Am.1:11 Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de Edom, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque persiguió a espada a su hermano, y violó todo afecto natural; y en su furor le ha robado siempre, y perpetuamente ha guardado el rencor.  
Am.1:12 Prenderé fuego en Temán, y consumirá los palacios de Bosra.  
Am.1:13 Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de los hijos de Amón, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque para ensanchar sus tierras abrieron a las mujeres de Galaad que estaban encintas.  
Am.1:14 Encenderé fuego en el muro de Rabá, y consumirá sus palacios con estruendo en el día de la batalla, con tempestad en día tempestuoso;  
Am.1:15 y su rey irá en cautiverio, él y todos sus príncipes, dice Jehová.

No hay comentarios: