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COSAS NUEVAS Y ANTIGUAS



“Cercano estás tú, oh Señor, y todos tus mandamientos son verdad”. (Salmo 119:151).-

DIOS NO ESTA LEJOS

 Aunque la distancia entre el cielo y la tierra sea infinita y el infinito de Dios sea inaccesible para seres finitos como lo somos. Dios está cerca. Sin embargo, los filósofos de todos los tiempos le han buscado sin lograr hallarle. ¿Cómo escapó a la lógica de sus artificiosos razonamientos? Muchos le han imaginado según la fantasía de su espíritu humano y le han descrito de manera arbitraria e inescrupulosa y aún ridiculizándole. El apóstol Pablo, discurriendo en Atenas ante los filósofos del Areópago, no niega que al hombre le sea difícil encontrar a Dios; él dijo: “El Dios que hizo el mundo... él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas. Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra... para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros” (Hechos 17:24-27). El altar consagrado en Atenas “Al Dios no conocido” ponía de relieve la ignorancia de los griegos idólatras acerca del verdadero Dios y era la prueba de una infructuosa búsqueda.
 Dios permanece oculto a los sabios de este mundo y a los inteligentes de la tierra. Cuando la primera nave espacial rusa entró en el espacio extraterrestre, los astronautas declararon ante millones de telespectadores que no habían visto a Dios. Era irónico, pero al mismo tiempo una gran verdad. Dios no se deja ver por el hombre presuntuoso, porque este rehúsa discernirle en la incomparable perfección de la inmensa creación divina, ni por ninguno de los que han buscado y buscan sin cesar utilizarla para sus propios intereses, al explotar la miseria y la ignorancia de los pueblos, porque: “Cercano está el Señor a los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu”. (Salmo 34:18).-
 Dios no está lejos, decimos, pero, para hallarle, es necesario seguir el camino que El mismo nos indica.
 Ese camino, el rey David lo había encontrado cuando escribió: “Cercano está el Señor a los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu”.
 Humillarse ante la suprema grandeza del Creador, reconocer su propia miseria ante su perfección infinita, reconocer su propio pecado ante su justicia absoluta: esto es necesario para que Dios se deje hallar. Descubriremos entonces que El está cercano, que El nos ama y que está pronto para salvamos.
 “Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes y para vivificar el corazón de los quebrantados” (Isaías 57:15). Por eso, al terminar su discurso a los filósofos de Atenas. Pablo podía decir: “Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan” (Hechos 17:30). ¡Prestemos atención a estas palabras! Dios hace anunciar que todos tienen que arrepentirse. “por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos” (Hec. 17:31). El juzgará al mundo por medio de Jesucristo, el cual se presenta hoy como Salvador, y “fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación” (Romanos 4:25).
 “Buscad al Señor mientras puede ser hallado”. (Isaías 55:6).-
 Es en Cristo que Dios se ha acercado al hombre de modo palpable y concreto, al dar la prueba de un infinito amor que nuestro espíritu apenas puede concebir. “Dios estaba en Cristo” (2 Corintios 5:19).
 “Cercano estás tú, oh Señor”, exclamó el salmista al considerar la perfección de su Palabra. “Estás cercano” podemos exclama al considerar la cruz de Cristo, adonde El bajó para liberarnos de nuestros pecados y abrir su glorioso cielo a pecadores arrepentidos “Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de los sabios y de los entendidos, y las revelaste a los niños” (Mateo 11:25). Jesús decía esto al constatar con gozo que las cosas grandes de Dios, los humildes las entendían pero permanecían escondidas para los sabios de este mundo. Siempre será así.
 Todo hombre en su naturaleza tiene una íntima y profunda necesidad de Dios. Se lo ha buscado en todos los tiempos por un impulso innato y una exigencia a menudo inconsciente. Pero si el ser humano lo hace sin asumir la posición de un ser ínfimo y miserable, frente a un Dios grande y santo, Satanás aprovecha esa oportunidad para hacer de él su esclavo. Hoy se cuentan ya por millones las personas que practican el espiritismo, logias u otras pseudo religiones y pseudo cristianismo con la terrible ilusión de llegar hasta Dios y de poder alcanzar al Creador forzando el umbral de lo sobrenatural. Es el más sutil y funesto error al cual pueda hacer caer Satanás, porque la distancia entre éste y Dios viene a ser así, trágicamente imposible de cubrir como los 100.000 años luz de extensión de la vía láctea. Y, sin embargo, Dios está cercano y aún hoy se deja hallar por quien tiene un corazón quebrantado y contrito. “Buscad al Señor mientras puede ser hallado”, "llamenle en tanto que esta cercano", "me buscarán y me hallarán, porque me buscaran con todo su corazón" dice aún hoy El Señor Dios en (Jeremías 29:13).-

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“Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida”. (Juan 11:25).-

¿HAY UNA RESURRECCIÓN?

  Un profesor universitario habló cierta vez sobre el tema. «Hay una resurrección?» El dio un «no» rotundo a esa pregunta. Con una sonrisa compasiva terminó su conferencia diciendo a los estudiantes: «Lamento haber tenido que quitarles la última chispa de piadosa creencia en la Biblia. Si les dijera: Hay una resurrección, sería volver, en nuestra época esclarecida por la ciencia moderna, a la oscura mística de la Edad Media. Consuélense; no era más que una amable locura. La ciencia declara: No hay resurrección de los muertos».
 El día siguiente, los estudiantes se enteraron de que la noche anterior, después de una aparentemente exitosa operación, la joven esposa del profesor había fallecido de repente. Todos aguardaban con curiosidad la continuación de las conferencias de ese profesor. Quince días más tarde, él prosiguió con el mismo tema. Un silencio sepulcral reinaba en la sala colmada cuando el profesor, visiblemente conmovido, empezó, diciendo: «¡Hay una resurrección de los muertos! El grande y poderoso Dios que habita los cielos, pero que también está con los de corazón quebrantado me ha mostrado claramente, de un modo consternador, junto al lecho de muerte de mi querida esposa, durante la noche posterior a mi conferencia dogmática: No sólo hay un Dios eterno, hay también una resurrección. Perdónenme —como Dios me lo ha perdonado— que yo haya dicho lo contrario. Hoy retiro todas mis palabras. ¿Qué podría hacer, yo. pobre hombre, para encontrar consuelo y sostén, si no hubiera una resurrección?». No pudo decir más. Con un grito de dolor, el hombre se desplomó.
 Sí, hay una resurrección. No les creas, lector, a los seductores intelectuales.
  Que nadie te engañe, la naturaleza misma nos enseña, parecen que los inviernos son largos, crueles e intensos, pero cuanto mas largo el invierno, mas hermosa la primavera, puede que como planta que plantó el Padre, se te prenda la nieve, haciéndose hielo en tus huesos, pero permanece y espera que todo viene de arriba y se manifestará el Poder de la Resurreción... La noche es larga, muy negra y fría, pero espera, espera la mañana sin nubes de un sol esplendente lleno de tibias caricias... Oh!! son innumerables las pruebas de resurrección, plagadas en esta naturaleza sujeta a vanidad, pero hay pruebas y muchísimos testimonios de que El Resucitó entre nosotros los creyentes... Y si Cristo Resucitó, nosotros también seremos resucitados con El, esa resurrección nos pertenece desde ahora y en un eterno Amen.- 

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“La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros… Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él”. (Colosenses 3:16-17).-

PENSAMIENTOS

  No porque se frecuente la iglesia uno es cristiano, como tampoco por estar en un garaje una carretilla es un automóvil.
  La cruz nos dice lo que el pecado es para Dios; y el juicio lo manifestará al mundo.
  Si Dios solamente juzgara el pecado, sería justo, pero no habría amor. Si, al contrario, El perdonara todo, habría amor, pero no santidad ni justicia. Mas en la cruz hallamos la perfecta justicia y el perfecto amor (Sal.85:10: "La misericordia y la verdad se encontraron; La justicia y la paz se besaron"). Todas las glorias de Dios han sido plenamente manifestadas en esa cruz.
  La santa costumbre de alabar a Dios, de darle gracias por sus beneficios es el más seguro medio, para nosotros, de permanecer alegres y optimistas o de llegar a serlo, si no lo somos aún.
  Como la enfermedad hace sentir la presencia de la muerte, esto mismo es de grande bendición al convertido que dice con el apóstol Pablo en (Fil.1:21 "Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia"). La felicidad es más profunda que antes con esa enfermedad, con esas aflicciones y luchas. El creyente siente, de una manera muy diferente, que pertenece a otro mundo y que todo aquí abajo es sólo una cosa pasajera, salvo la Palabra de Dios, la cual permanece eternamente. El amor del Padre y de Cristo lo son todo para el creyente convertido, pero a estos, los sufrientes y mártires se les agregará una gloria diferente y un reposo venideros.
  Los creyentes difuntos están con el Señor, pero todos debemos pasar por la resurrección o regeneración, como Cristo, para estar en la casa del Padre.
 1°Jn.3:2 "Amados, ahora somos hijos de Dios (con dolores, aflicciones y tribulaciones), y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es".- Oh!!, ser semejante a Él, no iguales en poder y majestad, porque el es inigualable, pero si semejantes, con un cuerpo semejante, que podrá pasar a través de las paredes y entrar a puertas cerradas, un cuerpo que ya no este sujeto a leyes terrenas de gravedad, distancia, montañas u océanos, que puede alimentarse con alimentos terrenos como pescado y miel y alimentos de ángeles, un cuerpo sin dolores ni cansancio, un cuerpo que puede estar sencillamente vestido como un hortelano y a la vez ser tan esplendoroso como el de un arcángel... ¿Has considerado esto hermano, hermana, amigo, amiga? no en vano al terminar el Apocalipsis y al cerrarse el canon de las Escrituras quedan plasmadas estas palabras que solo anhelan los creyentes convertidos: Apoc. 22:17 "Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven..." "...Amén; sí, ven, Señor Jesús" (Apoc. 22:20).

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“Sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia”. (Romanos 6:16).-

“Todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. (Juan 8:34).-

MIREMOS NUESTRAS CADENAS

 Un herrero de la edad media fue puesto en la cárcel ¿Por qué razón? Lo ignoramos. En aquellos tiempos, hacía falta muy poca cosa para ir a parar a un calabozo. Este herrero examinó detenidamente la pesada cadena con la cual estaba atado, con la esperanza de descubrirle algún defecto, alguna burbuja que él hábil artesano, podría aprovechar para trabajar y abrir un eslabon y así liberarse de estar encadenado. Pero su esperanza fue de corta duración; pronto se dio cuenta de que esa cadena que le ataba no tenía defectos: él mismo la había forjado.
  Amigo hermano lector, quizá se halle usted atado por la cadena del pecado, Tal vez usted acusa a los demás de estar encadenado con ella. Tal vez usted dijo: «Mis padres, mis allegados, mis compañeros de trabajo y aun... Dios tienen la culpa». Pero mire más de cerca. Vuelva a tomar cada eslabón en mano. ¿No es usted quien forjó el primero? y luego ¿No agregó usted los demás? ¿Quiere que nombremos juntos esos eslabones?. El primer eslabón se llama egoísmo, se engancha luego con otro, que se llama egocentrismo. Al creerse el centro del mundo, ¡cuán fácilmente se culpa a los demás de no tener la debida consideración y de carecer de comprensión, pretensiones ésas que amargan las relaciones familiares y fraternas de la congregación! Otros eslabones tienen los nombres de orgullo, disconformidad, envidia, codicia, mentira, ligereza, frivolidad, malsana lectura y tele-videos o peligrosa compañía.  Usted está atado por su pecado como Lot en Sodoma o Sansón en el valle de Sorec. ¿Quién le liberará?: ni usted ni nosotros podemos liberarnos. Sólo Jesús libera del pecado. Venga a El ya en oración diciéndole "Señor, mira estas cadenas que me atan, no puedo ser libre sin ti, librarme ahora mi Señor..." Y El lo hará, porque fue enviado para eso, El cumplirá su ministerio, eso lo podemos asegurar.- "Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres". (Jn. 8:36).-

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“Verá el fruto de la aflicción de su alma, y quedará satisfecho”. (Isaías 53:11).-

NO HUBO REPOSO PARA EL

“Las zorras tienen guaridas, y las aves de los cielos nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza” (Lucas 9:58). Jesús iba de lugar en lugar, apretado por la muchedumbre. Desde la mañana enseñaba en el templo y pasaba la noche orando a Dios. Aun el día del reposo no tomaba el descanso al que tenía derecho. El decía: “Mi Padre ahora trabaja... y yo trabajo” (Juan 5:17). En su trabajo de amor, no podía descansar. Iba de Judea a Galilea y de Galilea a Judea. Cierta vez, cansado del camino, se sentó junto a un pozo, más para aguardar allí a una pecadora que para hallar reposo.
 Pero, lleno de solicitud para con sus discípulos, El, que no encontraba el descanso, quería procurarlo a los suyos, diciéndoles: “Venid vosotros aparte a un lugar desierto, y descansad un poco” (Marcos 6:31). Más tarde, al final del combate entablado en Getsemaní, cuando iba a cumplir el último y supremo esfuerzo del trabajo de su alma, se dirigió hacia sus discípulos y les dijo:
 “Dormid ya y descansad” (Marcos 14:41). Jesús es el mismo, ayer hoy y por los siglos, ¡Su corazón no ha cambiado! Su voz aún se hace oír: “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cagados y yo os haré descansar” (Mateo 11:28).
  El pecado y Satanás, la muerte y el infierno, el mundo y la carne, son los enemigos poderosos que Él venció. Lo que Dios preparó para el Redentor, ciertamente Él lo poseerá. Cuando cautivó a la cautividad, recibió dones para los hombres, para que pudiera dar dones a los hombres. Mientras repasamos los sufrimientos del Hijo de Dios, recordemos nuestro largo catálogo de transgresiones y considerémosle sufriendo bajo el peso de nuestra culpa. Aquí se echa un fundamento firme sobre el cual haga descansar su alma el pecador tembloroso. Nosotros somos la adquisición de su sangre, y los monumentos de su gracia; por esto Él continuamente intercede y esa intercesión prevalece destruyendo las obras del diablo en nosotros y a nuestro derredor.

         Hay descanso en el tierno amor 
         Del bendito Señor Jesús, 
         Siempre fiel, comparte el peso y el dolor,
         Cuando marchamos con la cruz.

        En tu senda ¡Oh buen Pastor!
        Sí, nos es menester andar,
        Pues nos llevas al descanso del amor
        Contigo en celestial gozar.

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“Escapa por tu vida... Date prisa, escápate allá”. 
(Génesis 19:17 y 22).-

“DATE PRISA”

 Estas eran las palabras de los ángeles dirigidas a Lot para salvarlos de la destrucción de una ciudad inmersa en la corrupción, la violencia y la inmoralidad. Estas mismas palabras están dirigidas hoy a muchos, aún dentro de las congregaciones, que están convictos de su estado espiritual y con la necesidad de un cambio, difieren o retardan esa obra necesaria. La salvación de los hombres más justos es por la misericordia de Dios, no por sus propios méritos. Somos salvados por gracia. El poder de Dios debe también reconocerse al sacar las almas de un estado de pecado y obrar transformaciones de vida. Si Dios no hubiera sido misericordioso con nosotros, nuestra demora hubiera sido nuestra ruina, muchos de los hoy convertidos reconocen esto que si no fuese la gracia hoy estarían muertos, o en una cárcel o quizá en la indigencia o quien sabe donde. Lot debe correr por su vida. Él no debe anhelar Sodoma ni nada de lo que en ella hay. Se le dan órdenes como estas a quienes, por medio de la gracia, son librados de un estado y condición de pecado. Escucha: No vuelvas al pecado ni a Satanás. No descanses en el yo ni en el mundo. Acude a Cristo y al cielo, pues eso es escapar a la montaña, no debiendo detenernos antes de llegar. En cuanto a esta destrucción, obsérvese que es una revelación de la ira de Dios contra el pecado y los pecadores de todas las edades. Aprendamos desde aquí, en las primeras páginas de la Santa Biblia, lo malo de pecar y su naturaleza dañina que conduce a la ruina.
 Se cuenta de un Predicador iba a abandonar la sala de reunión en la cual acababa de predicar el Evangelio, cuando oyó golpear suavemente a la puerta. En respuesta a su enérgico: «Pase», entró un hombre tímido, de cierta edad, el que deseaba hablarle. —¿En qué puedo servirle? —le preguntó el predicador. Pero el hombre no conseguía pronunciar una palabra. El silencio se hacia penoso cuando el visitante empezó a balbucear: —Discúlpeme... por favor… pero yo pensaba... pensaba que... — ¡Buen, hombre! ¿en qué pensaba usted? —trató de animarle el hermano Al fin, vacilando, el visitante le dijo: —Pensaba que era tiempo de que yo fuera salvo y de que...
 El hombre podía tener unos sesenta años de edad; su cara arrugada era la de un campesino. ¿Cómo podía inducírselo a hablar?. Finalmente, el predicador, con su forma particular de ser, le gritó con vivacidad: —Amigo, usted ha pensado ya por 60 años en su salvación y se halla aún bajo la condenación de Dios, sin esperanza de ir al cielo pero aguardando el espantoso juicio. Y usted sigue pensando que debe ser salvo. ¡Hombre! Caiga de rodillas inmediatamente, confiese a Dios sus pecados y pídale perdón en el nombre de Jesucristo. No tiene más tiempo que perder. ¿Quién sabe si usted verá el sol levantarse todavía una vez? Esta misma noche podría hallarse en el infierno. 
  ¡Pensar! ¡Pensar! ¡Pensar! y tanto divagar, ¡Pero perdido!
 Nuestro hombre quedó verdaderamente asustado al darse cuenta, de repente, del peligro que corría y cayó de rodillas, confesó sus pecados y halló la paz con Dios por medio de la fe en el Señor Jesucristo.
  ¿Ya pensó usted lector en la necesidad de ser salvo si no quiere estar perdido por la eternidad? “Date prisa, escápate al monte, escapa por ti vida”.

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“Te levantarás y tendrás misericordia de Sión, porque es tiempo de tener misericordia de ella, porque el plazo ha llegado. Porque tus siervos aman sus piedras y del polvo de ella tienen compasión”. (Salmo 102:13-14).-

UN TERRITORIO SI, PERO MUY ESPECIAL... 

 Toda la tierra pertenece al Señor, pero, en sus planes insondables, decidió separar de todos los demás países uno al que El declara ser suyo y que El distingue con un tratamiento particular, sea en juicio o sea en bendición: es la tierra de Canaán o, dicho de otro modo, Palestina, tierra prometida a Abraham y a su descendencia para siempre.
 Es allí donde Dios estableció su santuario y donde sus sacerdotes oficiaban ante El; es allí donde sus profetas anunciaron la ruina de Israel, la dispersión del pueblo entre las naciones y su futura restauración, de la cual vemos los signos precursores; es allí donde Juan el Bautista empezó, prosiguió y terminó su carrera de precursor del Mesías; es allí donde nació el Salvador, allí donde fue bautizado, donde El predicó y enseñó; es allí donde El murió por la salvación de TODOS los que creen en El, de allí subió triunfante a la diestra de Dios; es allí donde el Espíritu Santo bajó con poder el día de Pentecostés; de allí el Evangelio se esparció hasta los extremos de la tierra; es allí donde el Señor de gloria bajará, afirmando sus pies sobre el monte de los Olivos; es aun allí donde será establecido su trono y restaurado su culto.
 Ese sector del planeta es el centro de todos los pensamientos de Dios y de sus operaciones con relación a la Tierra. Es cierto que, a menudo, ha sido un objeto de debates y de discordia para las naciones. Ha sido y será todavía el teatro y el centro de guerras crueles. Pero, por encima del fragor de las batallas y de las contiendas de las naciones, la fe retiene la palabra de Dios: “La tierra mía es” (Levítico 25:23).- Gloriaaa...!!! Gloriaaa a Su Santo Nombre... !!! ¿Hasta cuando Señor Dios de Abraham se hartará de beber esta tierra la sangre de tantos inocentes que a causa de conflicto de intereses no alcanzan la paz?.- Perdona Señor mi pregunta, pero allí, justo en Jerusalén, sobre el monte de la Calavera, se derramó la sangre mas inocente, la del "señalado entre diez mil... (arcángeles)", ¿no es suficiente ese precio?, Quizá no hemos orado suficientemente por "la paz de Jerusalém...".- Anhelamos la paz de toda la tierra y en especial de Oriente Medio, que se diga, paz y seguridad, anhelamos tu venida Oh!! "Raíz de David"...
  Dios bendiga con paz y prosperidad a todos los que habitan esa región, desde desde el Mediterráneo hasta el Eufrates desde el Libano hasta Egipto, incluyendo los términos de Persia y Asiria... y muchos alcancen la salvación vislumbrando al Príncipe de paz. Amen.-

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“Es tiempo de que el juicio comience por la casa de Dios; y si primero comienza por nosotros, ¿cuál será el fin de aquellos que no obedecen al evangelio de Dios?” (1 Pedro 4:17)
“Babilonia, hermosura de reinos y ornamento de la grandeza de los caldeos, será como Sodoma y Gomorra, a las que trastornó Dios. Nunca más será habitada... dormirán allí las fieras del desierto”. (Isaías 13:19-21).-

Leer la Biblia en ISAÍAS Capitulo 13 Versículos 1 al 22.-

 Vemos aquí que Dios empezó el juicio por Israel, que era entonces “su propia casa”. Es el principal tema de los doce primeros capítulos de Isaías. Ahora comienza una nueva división del libro hasta el capítulo 27, donde habla de los juicios sobre las naciones. Históricamente, se trata primeramente de los pueblos contemporáneos de Isaías. Por esta razón, las diferentes profecías que se encuentran sucesivamente ya se han cumplido a la letra. Relatos de viajes y de excavaciones confirman que aún hoy el emplazamiento de Babilonia es un lugar asolado y temido, en el cual viven sólo las fieras del desierto y como si fuese poco, en el año 2003 en el conflicto de Estados Unidos con Irak, se volvió a bombardear la zona destruyendo gran cantidad de piezas arqueológicas. No obstante, “ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada” (2 Pedro 1:29); dicho de otro modo, no se explica aisladamente ni aun por los hechos históricos posteriores. Lo que se debe siempre buscar en las Sagradas Escrituras, con la inteligencia que da el Espíritu Santo, es una relación con el pensamiento central y final de Dios, a saber, Cristo y su reino futuro.
 Así es que existe una Babilonia profética, la falsa Iglesia apóstata (véase Apocalipsis 17:5 y 18). Esta caerá antes del establecimiento del reino para la alegría de los santos, los que se regocijan en la grandeza de Dios. “los que se alegran con mi gloria” (V. 3). “Alégrate sobre ella, cielo, y vosotros, santos, apóstoles y profetas; porque Dios os ha hecho justicia en ella” (Apocalipsis 18:20; compárese con Salmo 35:15 y 26). Cuidémonos de que la pomposidad e idolatría no entre en nuestras congregaciones, por que mas allá de un "espacio físico ubicado entre siete colinas" se habla del espíritu irreverente de babilonia al cual hacemos bien en resistirle permaneciendo en la "doctrina de los apóstoles..."

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“El hombre morirá, y será cortado; perecerá el hombre, ¿y dónde estará él? (Dios) cercó de vallado mi camino, y no pasaré; …me ha despojado de mi gloria, y quitado la corona de mi cabeza… y perezco”. (Job 14:10 y 19:8-10).-

¿DONDE ESTA SU ALMA?

 ¡Cuán tristes son las quejas de Job! (el integro) ¿Qué es el fuego del infierno, sino la ira de Dios? Las conciencias cauterizadas lo sentirán en el más allá, pero ahora no lo temen: las conciencias iluminadas lo temen ahora, pero no lo sentirán en el más allá. Error muy corriente es pensar que Dios trata como enemigo a quien aflige. —Toda criatura es para nosotros lo que Dios hace que sea.-
 Un renombrado hombre de ciencia, tal vez demasiado consciente de su saber. A menudo decía a sus alumnos, jóvenes estudiantes, que en ese momento existían sólo siete hombres ilustres sobre la tierra y, sin duda, él se contaba entre ellos. Pero enfermó de un terrible mal, un cáncer de estómago. Derribado por el mal, vio su cuerpo decaer poco a poco y los dolores se volvieron cada vez más agudos. Repasaba en su mente todas las grandes teorías que habían nutrido su pensamiento. Buscaba ahora una explicación a otro problema en el que había pensado aplicándolo a los demás pero nunca en relación consigo mismo: ¿Qué era la muerte? ¿Qué había más allá? y tal vez ¿a quién debía encontrar más allá de la muerte? ¿Y qué ocurriría con su cuerpo y su alma? ¿Debía él morir como cualquiera, el, cuyo cerebro se hallaba lleno de ricos conocimientos? Era injusto. Un científico no debería morir como un hombre común. El se rebeló.
 Un creyente fue a visitarle y trató de hacerle entrever otros horizontes. Fue en vano. Porque Dios usa a los que se hallan más cerca del necesitado para tender una mano ayudadora, para consolar, para sacar de la desesperación, para abatir la disconformidad, aun para sacar del error. Porque ¿cómo puede el alma desalentada y descontenta experimentar el amor de Dios si no es por medio del amor de alguien que se encuentre a su lado listo para dar amor? El alma desalentada y abatida sentirá un toque alentador y recibirá paz, cuando se extienda hacia ella una mano muy amiga con tierno interés. Dios usa las manos que han sido consagradas a Él para dar bendición. Pero hay casos como el de este hombre de ciencia que se hundió en una noche moral sin salida y murió sin haber hallado consuelo ni esperanza.
 Una estatua de bronce se levanta en su memoria. Un ilustre nombre está grabado en la piedra. Pero lo que la piedra no dice es la desesperación del hombre cuando se dio cuenta, al morir, que riquezas, honores y ciencia sólo son vanidad. Una única cosa importa verdaderamente: conocer a Jesús como su personal Salvador. Conocerlo íntimamente...

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“El hombre morirá, y será cortado; perecerá el hombre, ¿y dónde estará él? (Dios) cercó de vallado mi camino, y no pasaré; …me ha despojado de mi gloria, y quitado la corona de mi cabeza… y perezco”. (Job 14:10 y 19:8-10).-

¿DONDE ESTA SU ALMA?

 ¡Cuán tristes son las quejas de Job! (el integro) ¿Qué es el fuego del infierno, sino la ira de Dios? Las conciencias cauterizadas lo sentirán en el más allá, pero ahora no lo temen: las conciencias iluminadas lo temen ahora, pero no lo sentirán en el más allá. Error muy corriente es pensar que Dios trata como enemigo a quien aflige. —Toda criatura es para nosotros lo que Dios hace que sea.-
 Un renombrado hombre de ciencia, tal vez demasiado consciente de su saber. A menudo decía a sus alumnos, jóvenes estudiantes, que en ese momento existían sólo siete hombres ilustres sobre la tierra y, sin duda, él se contaba entre ellos. Pero enfermó de un terrible mal, un cáncer de estómago. Derribado por el mal, vio su cuerpo decaer poco a poco y los dolores se volvieron cada vez más agudos. Repasaba en su mente todas las grandes teorías que habían nutrido su pensamiento. Buscaba ahora una explicación a otro problema en el que había pensado aplicándolo a los demás pero nunca en relación consigo mismo: ¿Qué era la muerte? ¿Qué había más allá? y tal vez ¿a quién debía encontrar más allá de la muerte? ¿Y qué ocurriría con su cuerpo y su alma? ¿Debía él morir como cualquiera, el, cuyo cerebro se hallaba lleno de ricos conocimientos? Era injusto. Un científico no debería morir como un hombre común. El se rebeló.
 Un creyente fue a visitarle y trató de hacerle entrever otros horizontes. Fue en vano. Porque Dios usa a los que se hallan más cerca del necesitado para tender una mano ayudadora, para consolar, para sacar de la desesperación, para abatir la disconformidad, aun para sacar del error. Porque ¿cómo puede el alma desalentada y descontenta experimentar el amor de Dios si no es por medio del amor de alguien que se encuentre a su lado listo para dar amor? El alma desalentada y abatida sentirá un toque alentador y recibirá paz, cuando se extienda hacia ella una mano muy amiga con tierno interés. Dios usa las manos que han sido consagradas a Él para dar bendición. Pero hay casos como el de este hombre de ciencia que se hundió en una noche moral sin salida y murió sin haber hallado consuelo ni esperanza.

 Una estatua de bronce se levanta en su memoria. Un ilustre nombre está grabado en la piedra. Pero lo que la piedra no dice es la desesperación del hombre cuando se dio cuenta, al morir, que riquezas, honores y ciencia sólo son vanidad. Una única cosa importa verdaderamente: conocer a Jesús como su personal Salvador. Conocerlo íntimamente...



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“Les hablarás, pues, mis palabras, escuchen o dejen de escuchar”. (Ezequiel 2:7)

HABLAR DE CRISTO

 Si se le hablaba de las cosas de la tierra a un siervo de Dios ya anciano, no sólo demostraba poco interés, sino que su espíritu parecía no captarlas. Pero si se le hablaba del cielo, del Dios que vino a salvar al hombre de su miseria, o si se le dejaba hablar de El, entonces su rostro se iluminaba y las palabras brotaban con abundancia de sus labios. Hablaba de cosas conocidas, creídas y vividas. Cuántas veces se le ha oído decir cuando presentaba la Palabra de Dios: «¡Déjenme hablarles de mi Salvador! No me cansaré de hablarles de El». Y no se cansaba. No tenía mucha instrucción. Había seguido la escuela primaria solamente y tan pronto como estuvo capacitado para trabajar, lo mandaron a hacerlo con las tareas rurales.
 Había leído mucho, muchísimo, primeramente la Biblia y luego los más sólidos comentarios de las Escrituras. Fue así como aprendió a hablar correctamente. A menudo incurría en repeticiones y sus involuntarias reiteraciones eran como golpes de martillo. Se dejaba arrastrar por el tema que desarrollaba. Con voz apremiante, invitaba al pecador a arrepentirse o con voz conmovida consolaba los corazones afligidos.
  Ahora esta voz ha callado, ya no esta entre nosotros.
 Pero el mensaje que ella presentaba permanece. Ese mensaje es aún actual y de una urgente necesidad: el hombre, a causa de su pecado, se ha cerrado el acceso a la presencia de Dios, pero Dios quiere salvarlo. El lo salva según su justicia y su santidad, porque halló a quien nos sustituyera y llevó nuestros pecados en la cruz: Cristo murió por nosotros. Por medio de la fe en El, estamos perdonados y justificados.


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“Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación de vida”. (Romanos 5:18).-

LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD

 Un joven monarca encargó a unos historiadores que escribieran para él la historia de la humanidad. A la edad de cuarenta años, se informó del trabajo: los historiadores se hallaban sólo a la mitad de camino de la recopilación de los datos. «Abrevien» les dijo. Decidieron, pues, reducir la obra a sus tres cuartas partes. A los sesenta años, el soberano les dijo aún “Abrevien”. Condensaron aún mas su trabajo, el cual constó de un único volumen. A los ochenta años, estando en agonía, el monarca les preguntó: —Y entonces, han podido abreviar la historia de la humanidad...? Ellos le contestaron —Señor, los hombres nacieron, vivieron y murieron.
 Oh! si el monarca y sus historiadores hubiesen leído las primeras páginas de la Biblia, habrían pronto descubierto lo que buscaron durante años. “Este es el libro de las generaciones de Adán... vivió Adán... y engendró... después... vivió Adán... y murió” (Génesis 5).
“Vivió Set... y engendró... y murió”.
“Vivió Enós... engendró y murió”:
nacer, vivir y morir.
 En realidad, el monarca sabía esto muy bien. Pero, ¿Y si hubiese habido en la historia de la humanidad un tiempo o un país en el cual no se muriera? ¡Si hubiese en algún momento una excepción a esa regla tan rigurosa! Nacer y vivir, muy bien, pero, ¿morir?, ¡qué horrible término! ¡No pensemos en ello!... ¡Cuán vacías son estas últimas palabras!
 El pecado introdujo la muerte en este mundo, (como en Argentina, todos los que nacen argentinos tienen una Deuda Externa "per capita" de unos 3.500 dolares, cada uno, deuda que contrajeron sus antepasados) así, traemos la deuda de la herencia adámica, pero Cristo vino a traer la vida. Porque mediante la fe en su obra redentora tenemos vida eterna. Si, las consecuencias de la falta de Adán se aplican a todos los hombres, el valor del sacrificio redentor de Cristo es tal a los ojos de Dios que salva a todos los que creen. 1°Ped.1:18 al 20 dice: sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación, ya destinado desde antes de la fundación del mundo, pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros, y mediante el cual creéis en Dios, quien le resucitó de los muertos y le ha dado gloria, para que vuestra fe y esperanza sean en Dios. 
 En otro lugar dice "inmolado, desde antes de la fundación del mundo...", (Porque un cordero o un chivo, inmolado=presentado, no tenia conciencia por ser un animalito, pero el Cordero de Dios estuvo en sus plenos conocimientos divinos durante el trayecto que reinó la muerte y de la Ley) era como si fuese cortado con cuchillo en sus vísceras, en sus entrañas, porque a través de toda la tristísima historia de la humanidad, no hubo niño, mujer u hombre que haya padecido injusticia, dolor y/o muerte por las guerras y los vandalismos que El no se haya acongojado en espíritu, hasta que en obediencia al Padre espero ser enviado a este mundo a pesar que deseaba profundamente haber intervenido antes en la historia, pero el "aprendió la obediencia" ¿...? misterio de esta pedagogía, pero sabemos que fue "obediente hasta la muerte y muerte de cruz", y "Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos..." Rom.5:19.-
 Oh!!! amor, amor... Oh!! amor santo, santo, santo... Insondable amor... mi alma te adora...

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“Porque dijo (el rey de Asiria): Con el poder de mi mano lo he hecho, y con mi sabiduría... ¿Se gloriará el hacha contra el que con ella corta? ¿Se ensoberbecerá la sierra contra el que la mueve?... Por esto el Señor… enviará debilidad sobre sus robustos, y debajo de su gloria encenderá una hoguera como ardor de fuego”.
(Isaías 10:13-16).-

Leer la Biblia en ISAIAS Capitulo 10 Versículos 1 al 16.-

  Los primeros cuatro versículos deben unírselos a los versículos 8 al 21 del capítulo 9.- Pero entrando en el tema ¡Pobres de las potestades superiores que conciben y decretan normas injustas! ¡Ay de los oficiales inferiores que les dan vigencia y los registran! Pero, ¿qué harán los pecadores? ¿Adónde huirán?.-
  Estos primeros 4 versículos del capítulo 10 nos muestran todas las razones por las cuales el furor de Dios esta hacia Israel y que “no ha cesado hasta el día de hoy... sino que todavía esa mano está extendida”. Y esta mano esgrime una temible vara para castigar al pueblo culpable: esa vara es Asiria, la que ya fue nombrada. Existió un asirio histórico (Senaquerib y sus ejércitos: véase cap. 36:1). Pero sólo ha sido una figura del terrible asirio profético que invadirá el país de Israel un poco antes del reino de Cristo. En su indignación, Dios ordenará ese ataque contra su pueblo. Pero el agresor lo tomará como pretexto para atribuirse sus éxitos y aun para elevarse contra Dios (Versículos 13 y 15); comparese 2 Reyes 19:23 y siguientes). ¡Qué locura! La herramienta no es nada sin la mano que la maneja. Por esto, cuando haya terminado de servirse de esa vara. Dios le prenderá fuego como se quema a un simple palo.
  ¿No es igualmente necio que los cristianos emulen a la gente del mundo en sus vanidades en lugar de mantenerse en las cosas que son su honra especial? Porque no sería más fuera de lugar que una herramienta se jacte o que luche contra el que la formó.-
 Aprovechemos este ejemplo extremo para acordamos modestamente de lo que somos, aun como creyentes: simples instrumentos sin fuerza ni sabiduría propia, a los cuales el Señor puede poner a un lado o reemplazar como le agrade.
“Cuando viene la soberbia, viene también la deshonra”.
“La soberbia del hombre le abate; pero al humilde de espíritu sustenta la honra” (Proverbios 11:2 y 29:23),
    El clamor de un ser humano sabio siempre será: “Preserva también a tu siervo de las soberbias; que no se enseñoreen de mí” (Salmo 19:13).

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“¿Quién, pues, podrá ser salvo? Y mirándolos Jesús, les dijo: Para los hombres esto es imposible; más para Dios todo es posible”. (Mateo 19:25-26).-

LO QUE EL HOMBRE PUEDE Y... NO PUEDE

 El hombre es capaz de hacer grandes cosas. Puede: Crear magníficas obras de arte; fabrica complicados aparatos; con la ayuda de computadoras, solucionar intrincados problemas; con poco dinero, ganar grandes sumas.
  En pocos días ir a la Luna, caminar en ella, volver a la Tierra, y aterrizar en un determinado lugar y todo esto a la vista de espectadores terrestres; surcar los mares con submarinos movidos por energía atómica.
  Muchos de estos hechos parecían imposibles a las generaciones pasadas y existían sólo en la imaginación de algunos escritores de ciencia ficción. Pero ahora parece que el hombre ha llegado a dominar la tierra, el agua, el aire y la estratosfera.-
  Mas, pese a sus hazañas, hay cosas que él ser humano no puede hacer. No puede: Restaurar una telaraña que ha sido estropeada; componer una flor quebrada por el viento; volver a ser joven e impedir su muerte; anular los años en que anduvo por mal camino ni impedir las consecuencias de sus errores y/o borrar sus pecados.
  Puede hacer grandes cosas, pero no puede hacer las más ínfimas, ni aun borrar un pecado pequeño. Y, sin embargo, basta un pecado para mantener al ser humano alejado de Dios por la eternidad.
  A causa de un pecado. Adán y Eva fueron expulsados del jardín de Edén. A causa de un pecado. Moisés no pudo entrar en el país de la Promesa. A causa de un pecado, muchos sufrimientos se abatieron sobre la casa de David. Sólo el Hijo de Dios tiene el poder de quitar los pecados de los que creen en El y en su obra expiatoria. Por lo cual dice: "Yo deshice como una nube tus rebeliones, y como niebla tus pecados; vuélvete a mí, porque yo te redimí". (Isaias 44:22).- Si los seres humanos con lo efímeros que somos, hemos logrado tanto, cuanto mas El Señor Dios de todas las cosas puede hacer una nueva criatura de alguien de quien no se puede esperar nada. 

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“No me avergüenzo, porque yo sé a quién he creído”. 
(2 Timoteo 1:12).-

“Sabemos que somos de Dios”. (1 Juan 5:19).-

“YO CONFÍO EN DIOS QUE SERA ASÍ” (HECHOS 27:25)

 Un hombre rico, culto, de elevada cuna. Fue llamado en las horas más dramáticas de la historia de su país. Sus consejos eran escuchados por los grandes de la tierra. Viajó por el mundo entero y las multitudes le colmaron de honores. Murió... mientras buscaba en un juego de naipes lo que se dio en llamar cierto día «el vislumbre de la esperanza».
 Se puede apretar fuertemente todo lo que el mundo ofrece: fortuna, honores, saber y poder, pero cuando la mano tenga que aflojar su apretón y relajarse por última vez, ¿qué es lo que quedará? Nada, nada para irse “por el camino de donde no se vuelve”, nada para la eternidad, nada que Dios acepte.
  El profeta Daniel, anciano ya y todavía cautivo en Babilonia, era más rico al final de su carrera que el poderoso monarca de los Caldeos. No necesitaba "tirar las cartas" para conocer el porvenir. Dios mismo le hablaba y le revelaba sus secretos del modo más conmovedor: “Daniel, varón muy amado, está atento a mis palabras que te hablaré” (Daniel 10:11).
  Mientras la nave que llevaba a Pablo hacia Roma era sacudida por la tempestad, al punto que se había perdido toda esperanza de salvación, el apóstol podía tranquilizar a sus compañeros de viaje y decirles: “Esta noche ha estado conmigo un ángel del Dios de quien soy y a quien sirvo, diciendo: Pablo, no temas... Dios te ha concedido todos los que navegan contigo… Yo confío en Dios que será así como se me ha dicho” (Hechos 27:23-25).
 “Nosotros también creemos, por lo cual también hablamos” (2 Corintios 4:13). Amigo, hermano que esta leyendo, ¿cree también usted lo que Dios dice? o ¿Tendrá que ir todavía a consultar a algún otro?.- Si ya le aceptó Jesús por fe en su corazón, su suerte esta echada y podrá decir con el Salmo 16:5 y 6: "Jehová es la porción de mi herencia y de mi copa; Tú sustentas mi suerte"."Las cuerdas me cayeron en lugares deleitosos, Y es hermosa la heredad que me ha tocado".

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1°Jn.3:16 En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.

HEMOS CONOCIDO EL AMOR...


 Haber conocido el amor, no significa que lo hayamos entendido, asimilado, creído o aceptado... conocer algo o alguien, como al pasar, aun encontrándolo a diario, nos es puede ser algo extraño o alejado, fuera de nuestra burbuja, lo cual acrecienta nuestras responsabilidades...
 ¡Que hermoso momento en que nuestro duro corazón fue derretido por aquel entendimiento al contemplar al crucificado!!!, menos mal que solo pudimos comprender lo que podíamos llevar ese día, pues no lo resistiríamos. Muchos cayeron al suelo literalmente, comprendiendo algo de este amor, al conocer algo, no hay predicador suficientemente elocuente que lo pueda describir, por ello también nosotros, los que escuchamos a menudo las palabras de la cruz, seguimos con mezquindades entre ventajeros o aprovechados... porque tanto los unos como los otros no hemos entendido el mensaje... mayormente en estos tiempos en que la maldad se esta multiplicando exponencialmente, el amor de muchos se ha enfriado...
 ¿Que diremos a esto?... Hay tanto por hacer a causa de las economías regionales, unas están mas prosperas que otras y hemos de trabajar para ganarnos el pan y para cumplir la cuota de confort standart para nuestros conyuges e hijos, que nos queda poco tiempo para entregar nuestras vidas a la causa del Señor... 
 Dios nos de entendimiento para poder ser templados y nos abra las puertas para poder equilibrarnos, pues no estaremos haciendo bien abandonando nuestra familia en necesidades para dedicarnos a los hermanos o la la Obra de Dios y hacemos peor si nos dedicamos únicamente a la familia y abandonamos la Causa en nuestra congregación... Hemos de estar dispuestos y ceñidos los lomos con la verdad y la coraza de justicia, calzados los pies con el apresto del Evangelio de la paz, el yelmo de salvación colocado siempre, y el escudo de la fe no debe faltar, y tomar la espada del Espíritu, para estar dispuestos a velar, defender y avanzar contra toda obra satánica que quiera introducirse en nuestro hogar, en la congregación y/o en nuestras vidas... 
 No esperemos el agradecimiento o el reconocimiento, ni siquiera de nuestra misma familia, sino que la fuente de inspiración será en Aquel que puso Su Vida por ti, por mi, por todos nosotros, demostrando nosotros, al mantener nuestra familia unida, al luchar por la unidad y crecimiento de la congregación y por mantener la oración y lectura de la Santa Biblia para el crecimiento personal, que estamos entendiendo algo de este amor que sobrepasa todo entendimiento. 
 Hermano hermana... no has de bajar los brazos y decir "yo no sigo...", "yo no doy mas...", "que se arregle otro...", "yo me voy y desaparezco y se terminó...", pues nuestras fuerzas vienen de Cristo Jesús, quien nos amo y se entregó a si mismo por ti y por mi, por nosotros...   
 El apóstol Pablo expresó algo paralelamente a nuestro tema y lo transcribo totalmente pues no siento en este momento seccionar el párrafo ya que considero que no tiene sobrante a lo que estamos tratando...

El amor que excede a todo conocimiento  

Ef.3:14 Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre de nuestro Señor Jesucristo,  
Ef.3:15 de quien toma nombre toda familia en los cielos y en la tierra,  
Ef.3:16 para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu;  
Ef.3:17 para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor,  
Ef.3:18 seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura,  
Ef.3:19 y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.  
Ef.3:20 Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros,  
Ef.3:21 a él sea gloria en la iglesia en Cristo Jesús por todas las edades, por los siglos de los siglos. Amén.   

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1ºCor.16:14 Todas vuestras cosas sean hechas con amor.

TODAS VUESTRAS COSAS...



 Bueno, ahora llegamos a algo cotidiano y común, quizá fácil de entender y quizá un tanto mas difícil de practicar, todas nuestras cosas... sean hechas con amor...
 Siempre recuerdo el testimonio de una jovencita que estaba trabando en una casa de familia con recursos, era como la criada que si bien le pagaban también le brindaban casa hospedaje, comida y ropa... Estaba para lo que se necesite en lo domestico, dentro de la casa, primero comenzó haciendo las cosas con entusiasmo, con los pisos, con los platos, con las paredes, con los dormitorios, con los baños, pero pasado un tiempito comenzó a pesar toda esa tarea y lo hacía casi de mala gana... Hasta que, un día el señorito de la casa, joven apreciable, del que ella ni tenía ilusiones por las diferencias de los estratos sociales a los que pertenecían, el joven se fijo en ella y le hablo de su interés por que sea su esposa... ¡Ah!!! ¡Como cambió la cosa!!! Ahora era todo diferente... ella era hacendosa y enérgica pero ahora volaba, cantaba, reía, había sido agregado a todos sus atributos, todas sus virtudes de niña responsable y trabajadora, había sido agregado el amor... Ahora ni siquiera quería cobrar por lo que hacía, ahora estaba plena de felicidad, de esperanza, había cambiado la situación de ser casi una esclava ahora era casi dueña al tener la promesa de matrimonio del heredero...  
 Los cristianos hemos de pertenecer a la Iglesia, la novia (por así decirlo), la esposa del Cristo, ha recibido las palabras de amor, las promesas de gracias inconmensurables, ¿ha de ser menos que este testimonio que hemos recibido?, la joven lo hacía con un amor natural por el amor a su esposo que quizá pensase que no lo merecía por la gran diferencia de clase, y lo hacía por beneficios temporales, cuanto mas la Iglesia, cada uno de nosotros, por un amor mucho mas sublime con que somos amados, no hemos de hacer nuestras cosas, todas nuestras cosas tienen que tener el ingrediente del amor, del amor puro, del amor justo, del amor santo... (No el amor lleno de parcialidades e inclinaciones)
 Todo lo que haga piadosamente tiene que tener el ingrediente inestimable del amor y ello es que va a dejar una gran ganancia y contentamiento como dice el apóstol Pablo en 1ºTim.6:6 "Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento;".- 
 ¿Me pesa mi trabajo secular? ¿no soporto mis jefes? ¿No soporto las tareas del hogar? ¿No soporto los niños con sus requerimientos? ¿Hago todo como un autómata?... Bueno es hacer las cosas por que nos hemos comprometido y estamos honrando nuestra palabra, pero es una carga pesada, para muchos mas que pesada... 
 Hemos de pedirle al Señor Jesús, "Señor, lléname de tu amor, ayúdame a amar a mis jefes, ayúdame a amar la labor de mis manos... Es muy triste ver cuanta gente concurre a sus labores sin ganas y depresivos, necesitan algo que les estimule, y apoyados en algún vicio como el tabaco es que se enfrentan a las rutinas, quizá no sea el caso de los cristianos lo de los vicios, no debería serlo, pero mas triste es ver cristianos enredados en este tipo de cansancios, ¿como es que no han alcanzado las promesas...?, ¿Como es que hay encargados de Obras que pastorean congregaciones que van sin ganas a predicar? ¿Como es que hay cristianos, varones o mujeres, que no tienen entusiasmo para desarrollar el ministerio? sea la portería de la Iglesia, sea la limpieza de pisos y baños, sea el coro, sea la orquesta, sea la administración, sea lo que sea, que hagamos para la Iglesia o para lo secular, nuestra vida particular... ¿No estamos delante de la presencia del Señor? ¿No se rasgó el velo de arriba abajo?... 
 Nos sigue diciendo el apóstol Pablo en Col.3:23 "Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres;..." Siii!!! como para el Rey...!!! Aleluya...!!! ¿No amas tu a Jesús?, ¿cuanto le amas...? demostremoslo hoy, Señor ayúdame a vivir mi vida delante de tu presencia, como viendo al invisible... No importa si me paga o no (aunque el Señor no se va a quedar deudor, se lo aseguro), lo que importa que mi vida sea un olor fragante delante de Su presencia, pleno mi corazón de felicidad si El me esta mirando, seré mas feliz que Rut en los campos de Booz, así trabajare este día mi Señor... gracias por permitirme esta reflexión, esta meditación donde tu palabra se agolpa en mi mente, ayúdame que no sea solo emoción del momento y que todas mis cosas sean hechas con amor, por el Nombre de Jesucristo el amado de mi alma... Amén.- 

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1ºCor.13:3 Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si entregase mi cuerpo para ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve. 

DE NADA ME SIRVE...



 Nuestras buenas obras, nuestra religiosidad, son insuficientes para lograr obtener algo de parte del cielo... Aunque igualmente no quedan sin recompensa aquí en la tierra como dice Mat.6:2 "Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa..." 
 No se trata de entregarse todo a los necesitados, se trata de entregarse todo a Cristo, por su amor y por su misericordia y  que surja como fruto digno de un arrepentimiento genuino, todo que sea que se produzca en nosotros para la salvación de mi prójimo... De otra forma, me sirve quizá, para lograr un buen nombre en esta tierra, que para el cielo es nada, "...de nada le sirve", sino mas bien para que le sea descontado, para acrecentar responsabilidades, (Si es que hubiese una Cuenta Corriente donde depositáramos buenas obras y se descuenta por los pecados que cometemos, lo cual no existe), pues al haber rechazado la Obra Redentora de Cristo, como diciéndole: "¿para que moriste por mi...? si yo podía!!!", es que se merece tanto mas el infierno de fuego que un pecador a conciencia.
 Se trata de un amor diferente al humano, pues nosotros somos selectivos como dice en Rom.5:7 "Ciertamente, apenas morirá alguno por un justo; con todo, pudiera ser que alguno osara morir por el bueno"., mas el amor de Dios se manifiesta en "...que siendo pecadores, Cristo murió por nosotros..."
 Meditando el Tema del amor, durante todo este mes de Abril, me he encontrado, como ministro, que me encuentro en muchas faltas y necesito ser inundado de ese amor verdadero, del amor puro y santo, pues aunque nuestra atracción amorosa, que el mundo y la psicología atan a lo sexual, y nosotros no nos encontremos saturado de ello, aún sigue siendo nuestra fuente impura... Necesitamos de la fuente del Amor, necesitamos beber de los ríos del Calvario, necesitamos considerar más al crucificado, para que nos sea dada la gracia de reflejar ese amor, que llega a conmover al grandiosísimo corazón del Padre...
 De otra manera, por mas que reciba todos los honores de mi congregación, o con todos los honores del mundo como un Premio Nobel de la Paz, de nada me sirve...
 Se humecen mis ojos en estos momentos, mi corazón se quebranta... Señor ayúdame a replantear mis obras, puesto que hemos de ser juzgados en el hacer y en el no hacer, (sin amor prefiero no hacer, puesto que he de ser juzgado igualmente), con amor prefiero mil veces hacer, pues aunque tenga millones de errores, el amor, "... el amor cubrirá todas las faltas (Prov.10:12).- Amén.-

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"Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas",
"sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia". (Santiago 1:2 y 3) 


DIVERSAS PRUEBAS 

"DIOS cerca a los Suyos para poder preservarlos, pero con frecuencia ellos ven solamente la parte mala del cerco e interpretan malamente Su forma de proceder. Asi sucedió con Job (Job 3:23). ¡Ah! pero Satanás conocía el valor de aquel cerco. Ved su testimonio en el versículo 1:10. A través de cada prueba existen grietas que son atravesadas por los rayos del sol para que den luz espiritual a los que se hallan en tinieblas. Las espinas no se te hincan a no ser que te inclines sobre ellas, y nadie las toca sin Su conocimiento. Las palabras que te hieren, la carta que te causó pena, la gran herida de tu querido amigo, la carencia de dinero cuando se necesitaba, todas estas cosas las sabe El, quien simpatiza con nosotros como ningún otro y nos observa para ver si a pesar de todo nos atrevemos a confiar en El por completo.
“El que creyere ... no será confundido.” (1 Pedro 2:6.)

“Bienaventurada la que creyó, porque se cumplirán las cosas que le fueron dichas de parte del Señor.” (Lucas 1:45)".-
(Manantiales en el Desierto Enero 12)

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"...obteniendo el fin de vuestra fe, que es la salvación de vuestras almas". (1°Ped.1:9).-


EL FIN DE NUESTRA FE



"Esta epístola [del apóstol Pedro] fue dirigida a los creyentes en general, que son extranjeros en toda ciudad o país donde vivan y están diseminados por todas las naciones. Ellos tienen que atribuir su salvación al amor electivo del Padre, la redención del Hijo y la santificación del Espíritu Santo; y, así, dar gloria al Dios único en tres Personas en cuyo nombre han sido bautizados. —La esperanza en el vocabulario mundano se refiere sólo a un bien incierto, porque todas las esperanzas mundanas son inestables, edificadas sobre arena, y las esperanzas del cielo que tiene el mundano son conjeturas ciegas y sin fundamento. Pero la esperanza de los hijos del Dios vivo es una esperanza viva; no sólo acerca de su objeto, sino también en su efecto. [le] Vivifica y consuela en todas las angustias, capacita para enfrentar y superar todas las dificultades. La misericordia es la fuente de todo esto; sí, gran misericordia y misericordia múltiple. Ésta bien cimentada esperanza de salvación es un principio activo y vivo de obediencia en el alma del creyente. —El tema del gozo cristiano es la memoria de la felicidad puesta por delante. Es incorruptible, no puede acabarse; es una fortuna que no se puede gastar. También es incontaminada lo que significa su pureza y perfección. Inmarcesible porque no es más o menos placentera a veces, sino siempre la misma, no cambia. Todas las posesiones de aquí están manchadas con defectos y fallas; aún falta algo: casas lindas que tienen preocupaciones tristes revoloteando en torno a sus techos dorados y bien pintados; camas blandas y mesas llenas, a menudo con cuerpos enfermos y estómagos revueltos. Todas las posesiones están manchadas de pecado, sea al obtenerlas o al usarlas. ¡Cuán prontos estamos para hacer de las cosas que tenemos ocasión e instrumento de pecado, y pensar que no hay libertad ni deleite en su uso, sin abusar de ellas! Las posesiones mundanas son inciertas y pronto pasan como las flores y las plantas del campo. Eso debe ser del más alto valor, ya que se pone en el lugar mejor y más elevado: el cielo. Dichosos aquellos cuyos corazones donde el Espíritu Santo pone en esta herencia. Dios no sólo da gracia a su pueblo, pero lo preserva para gloria. —Cada creyente siempre tiene algo en que puede regocijarse grandemente; esto debe demostrarse en el semblante y la conducta. El Señor no aflige por gusto aunque su sabio amor suele asignar pruebas agudas para mostrar el corazón de su pueblo y para hacerles el bien al final. El oro no aumenta por ser probado en el fuego, se vuelve menos; pero la fe se afirma y multiplica por las tribulaciones y aflicciones. El oro debe perecer al final y sólo puede comprar cosas perecederas, mientras la prueba de fe será hallada para alabanza, honra y gloria. Esto debe reconciliarnos con las aflicciones presentes. Busquemos entonces creer en la excelencia de Cristo en sí y de su amor por nosotros; esto encenderá un fuego tal en el corazón que lo elevará en un sacrificio de amor hacia Él. La gloria de Dios y nuestra propia felicidad están tan unidas que si ahora buscamos sinceramente una, obtendremos la otra, cuando el alma ya no esté más sujeta al mal. La certeza de esta esperanza es como si los creyentes ya la hubieran recibido" Seleccionado y adaptado del Comentario Bíblico de Matthew Henry (1662-1714).-



Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá.  Mar.11:24


"OS DIGO..."



Oh!! el amor sublime!!, miremos estas palabras de amor del Salvador, para su pueblo que lava sus ropas y las emblanquece en la sangre del Cordero, "Por tanto os digo..." en el contexto de un "de cierto, de cierto os digo...", podría ser que hoy el Señor Jesús se interponga entre el y nuestra petición, y nos diga: "si puedes creer?, al que cree, al que cree, todo es posible...", (Mar.9:23)

¡Que re-afirmación!! "OS DIGO...", ¡Que amor...!!!... me quedo contemplando, poniendo mis ojos sobre las letras y palabras de este versículo, como un niñito que no sabe leer y hace como que lee mas no entiende, sabe que dice algo grande, mas no lo puede dimensionar...

Pareciera como que ayudamos al cielo con nuestra oración en la realización de aquellas obras necesarias a ser realizadas en este suelo, aportando nuestra sustancia de fe, nuestra certeza de un proyecto a realizar de aquella necesidad por la que intercedemos, para que sea mejorado ese proyecto por el gran Arquitecto y Diseñador de todas las cosas en el cielo y en la tierra, porque es un misterio para el creyente, el misterio de la oración y la fe, pues ¿No dice también: "Vuestro Padre sabe lo que vosotros necesitáis, antes que vosotros le pidáis..."? ¿No sabe El lo que debe hacer? ¿No conoce nuestra necesidad? ¿Necesita de nuestra oración?, por cierto que no necesita nuestro ruego para sacarnos adelante (ya no de lo que pasa en rededor nuestro, sino para rescatarnos solo a nosotros de nuestra vana manera de vivir), pues su amor hará que tarde o temprano nos comuniquemos, manteniendo El y preparando nuestra alma para el reencuentro con un arrepentido mas...

Nosotros si, somos los que necesitamos orar, para nuestra salud espiritual, para entender que todo lo que nos suceda, no aparece por que si, para darnos cuenta en donde estamos parados dentro del tiempo que vivimos y nuestra función en la tierra en el momento actual... Pero es necesario reafirmar la fe en SU PALABRA. Por tanto OS DIGO: "Creed que lo recibiréis, Y OS VENDRÁ..." "...Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David (el Reino), el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre:..." Apoc.3:7.- Aleluya!!!



Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis. Mat.21:22


EN ORACIÓN



La clave de la victoria, el centro de nuestra vida cristiana, (si bien la Espada del Espíritu es necesaria para las habilidades), la oración es la fuerza, el vigor del guerrero, pues con toda la teología y todo un equipo de nuestro lado para lanzarnos al avance contra el enemigo, para proyectar los emprendimientos, no se pueden realizar sin esto, sin la oración, y si se realiza algo es solo hojarascas que no permanecen, faltan las fuerzas del cielo... Jesús dice: "TODO", lo que pidiereis en oración "CREYENDO"., ese Todo, debe incluir lo que es de agrado o dentro de la voluntad de Dios. Pues hay cosas que pedimos y que no podríamos llevar...

La madre de Jacobo y Juan le hizo una petición muy hermosa al Señor Jesús, "Que estos mis dos hijos se sienten el uno a tu derecha y el otro a tu izquierda..." Jesús le dijo, No sabéis lo que pedís Mat. 20:20.-

Pero no obstante hemos de creer en cualquier petición pidiéndole al Señor iluminación para pedir como conviene, (Rom.8:26), aunque ya de por si no sabemos pedir o pedimos mal, para gastar en deleites, (Sant.4:6) y que hemos de pedir si no sabemos, pero el Espíritu Santo clama con gemidos indecibles.-

No dudar del Señor, El leproso de Mat. 8 dudaba de su amor, cuando le dijo "Señor, si quieres puedes limpiarme..." El padre del Joven endemoniado dudaba de su poder "Si puedes hacer algo..." Marc.9:22.-

No obstante a pesar de nuestras dudas El Señor puede obrar de todas formas como lo hizo en esos pasajes. En el caso de Juan 5 el Paralitico de Betesda, ese hombre luego de 38 años ya ni fe tenía, sin embargo El Señor opero igual por sobre todo argumento de incredulidad cuando le dijo "Levantate, toma tu lecho y vete e tu casa..." Ese hombre ya se había olvidado de las veces que clamo al Señor por que no podía llegar al estanque, ya se había olvidado de las veces que miró al cielo, se pensaba que todas sus lagrimas silenciosas habían sido en vano, pero un día cuando se le presentó El Señor, no le conoció ni tampoco le conoció luego de recibir el milagro... Que importante es conocer al Señor, conocerlo íntimamente, ello nos dará un grado sumo de confianza y fe que hablaremos como habla cada uno con su compañero (Ex.33:11)



Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra. Santiago 1:6

PERO PIDA CON FE.-



 Todo para la fe y nada para la duda.- La fe es inamovible, la fe se centra en la Palabra de Dios, si lo dijo Dios, se cumple, se cumple o se cumple, no tiene otra forma de tomarse, podrá tardar, podrá parecer que no podrá ser, que será imposible, pero el que hablo es el Dios de los imposible.

 La duda se engancha con cualquier corriente de pensamiento, con cualquier interpretación de realidades basadas en argumentos carnales o sea en vanidades que luego dejan al alma postrada y sin fuerzas en medio de terribles desiertos. Si hemos de pedir, ya que nos tomamos el trabajo, por que no hacerlo bien?? por que no invertir todas las fuerzas diciéndole al Señor, "Te creo y te alabo..."??. Aun viendo las peores situaciones, de enfermedad, de pobreza, de desilusión, con la peor situación familiar, laboral o espiritual, hemos de pedir con fe, sin fe es imposible agradar a Dios, sin fe no llegamos, es como hacer toda la instalación eléctrica y no conectar los cables... ¡Cuantos testimonios de personas que obraron sin fe y continúan con menos que al principio de sus peticiones! ahora son un mar de comentarios llenos de fracasos, y al final, siempre el sabor amargo de un "Dios ama a otros pero a mi no", "No soy hijo", el "Espíritu Santo me abandono", etc. etc. y otros tantos peligrosos comentarios que llevan a la destrucción del alma y todo por guardarse resabios de dudas que son los síntomas de pecados ocultamente acariciados que no se quieren dejar...

Señor aumentame la fe. Ayúdame Señor a poner toda mi fe en mi oración y esperar en esperanza contra esperanza hasta ver cumplida esa gracia solicitada, que este siempre dentro de tu voluntad y no dentro de mis caprichos...






“Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación de vida”. (Romanos 5:18).-



LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD



 Un joven monarca encargó a unos historiadores que escribieran para él la historia de la humanidad. A la edad de cuarenta años, se informó del trabajo: los historiadores se hallaban sólo a la mitad de camino de la recopilación de los datos. «Abrevien» les dijo. Decidieron, pues, reducir la obra a sus tres cuartas partes. A los sesenta años, el soberano les dijo aún “Abrevien”. Condensaron aún mas su trabajo, el cual constó de un único volumen. A los ochenta años, estando en agonía, el monarca les preguntó: —Y entonces, han podido abreviar la historia de la humanidad...? Ellos le contestaron —Señor, los hombres nacieron, vivieron y murieron.

 Oh! si el monarca y sus historiadores hubiesen leído las primeras páginas de la Biblia, habrían pronto descubierto lo que buscaron durante años. “Este es el libro de las generaciones de Adán... vivió Adán... y engendró... después... vivió Adán... y murió” (Génesis 5).

“Vivió Set... y engendró... y murió”.

“Vivió Enós... engendró y murió”:

nacer, vivir y morir.

 En realidad, el monarca sabía esto muy bien. Pero, ¿Y si hubiese habido en la historia de la humanidad un tiempo o un país en el cual no se muriera? ¡Si hubiese en algún momento una excepción a esa regla tan rigurosa! Nacer y vivir, muy bien, pero, ¿morir?, ¡qué horrible término! ¡No pensemos en ello!... ¡Cuán vacías son estas últimas palabras!

 El pecado introdujo la muerte en este mundo, (como en Argentina, todos los que nacen argentinos tienen una Deuda Externa "per capita" de unos 3.500 dolares, cada uno, deuda que contrajeron sus antepasados) así, traemos la deuda de la herencia adámica, pero Cristo vino a traer la vida. Porque mediante la fe en su obra redentora tenemos vida eterna. Si, las consecuencias de la falta de Adán se aplican a todos los hombres, el valor del sacrificio redentor de Cristo es tal a los ojos de Dios que salva a todos los que creen. 1°Ped.1:18 al 20 dice: sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación, ya destinado desde antes de la fundación del mundo, pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros, y mediante el cual creéis en Dios, quien le resucitó de los muertos y le ha dado gloria, para que vuestra fe y esperanza sean en Dios.

 En otro lugar dice "inmolado, desde antes de la fundación del mundo...", (Porque un cordero o un chivo, inmolado=presentado, no tenia conciencia por ser un animalito, pero el Cordero de Dios estuvo en sus plenos conocimientos divinos durante el trayecto que reinó la muerte y de la Ley) era como si fuese cortado con cuchillo en sus vísceras, en sus entrañas, porque a través de toda la tristísima historia de la humanidad, no hubo niño, mujer u hombre que haya padecido injusticia, dolor y/o muerte por las guerras y los vandalismos que El no se haya acongojado en espíritu, hasta que en obediencia al Padre espero ser enviado a este mundo a pesar que deseaba profundamente haber intervenido antes en la historia, pero el "aprendió la obediencia" ¿...? misterio de esta pedagogía, pero sabemos que fue "obediente hasta la muerte y muerte de cruz", y "Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos..." Rom.5:19.-

 Oh!!! amor, amor... Oh!! amor santo, santo, santo... Insondable amor... mi alma te adora...



“Porque dijo (el rey de Asiria): Con el poder de mi mano lo he hecho, y con mi sabiduría... ¿Se gloriará el hacha contra el que con ella corta? ¿Se ensoberbecerá la sierra contra el que la mueve?... Por esto el Señor… enviará debilidad sobre sus robustos, y debajo de su gloria encenderá una hoguera como ardor de fuego”.

(Isaías 10:13-16).-



Leer la Biblia en ISAIAS Capitulo 10 Versículos 1 al 16.-



  Los primeros cuatro versículos deben unírselos a los versículos 8 al 21 del capítulo 9.- Pero entrando en el tema ¡Pobres de las potestades superiores que conciben y decretan normas injustas! ¡Ay de los oficiales inferiores que les dan vigencia y los registran! Pero, ¿qué harán los pecadores? ¿Adónde huirán?.-

  Estos primeros 4 versículos del capítulo 10 nos muestran todas las razones por las cuales el furor de Dios esta hacia Israel y que “no ha cesado hasta el día de hoy... sino que todavía esa mano está extendida”. Y esta mano esgrime una temible vara para castigar al pueblo culpable: esa vara es Asiria, la que ya fue nombrada. Existió un asirio histórico (Senaquerib y sus ejércitos: véase cap. 36:1). Pero sólo ha sido una figura del terrible asirio profético que invadirá el país de Israel un poco antes del reino de Cristo. En su indignación, Dios ordenará ese ataque contra su pueblo. Pero el agresor lo tomará como pretexto para atribuirse sus éxitos y aun para elevarse contra Dios (Versículos 13 y 15); comparese 2 Reyes 19:23 y siguientes). ¡Qué locura! La herramienta no es nada sin la mano que la maneja. Por esto, cuando haya terminado de servirse de esa vara. Dios le prenderá fuego como se quema a un simple palo.

  ¿No es igualmente necio que los cristianos emulen a la gente del mundo en sus vanidades en lugar de mantenerse en las cosas que son su honra especial? Porque no sería más fuera de lugar que una herramienta se jacte o que luche contra el que la formó.-

 Aprovechemos este ejemplo extremo para acordamos modestamente de lo que somos, aun como creyentes: simples instrumentos sin fuerza ni sabiduría propia, a los cuales el Señor puede poner a un lado o reemplazar como le agrade.

“Cuando viene la soberbia, viene también la deshonra”.

“La soberbia del hombre le abate; pero al humilde de espíritu sustenta la honra” (Proverbios 11:2 y 29:23),

    El clamor de un ser humano sabio siempre será: “Preserva también a tu siervo de las soberbias; que no se enseñoreen de mí” (Salmo 19:13).



“¿Quién, pues, podrá ser salvo? Y mirándolos Jesús, les dijo: Para los hombres esto es imposible; más para Dios todo es posible”. (Mateo 19:25-26).-



LO QUE EL HOMBRE PUEDE Y... NO PUEDE



 El hombre es capaz de hacer grandes cosas. Puede: Crear magníficas obras de arte; fabrica complicados aparatos; con la ayuda de computadoras, solucionar intrincados problemas; con poco dinero, ganar grandes sumas.

  En pocos días ir a la Luna, caminar en ella, volver a la Tierra, y aterrizar en un determinado lugar y todo esto a la vista de espectadores terrestres; surcar los mares con submarinos movidos por energía atómica.

  Muchos de estos hechos parecían imposibles a las generaciones pasadas y existían sólo en la imaginación de algunos escritores de ciencia ficción. Pero ahora parece que el hombre ha llegado a dominar la tierra, el agua, el aire y la estratosfera.-

  Mas, pese a sus hazañas, hay cosas que él ser humano no puede hacer. No puede: Restaurar una telaraña que ha sido estropeada; componer una flor quebrada por el viento; volver a ser joven e impedir su muerte; anular los años en que anduvo por mal camino ni impedir las consecuencias de sus errores y/o borrar sus pecados.

  Puede hacer grandes cosas, pero no puede hacer las más ínfimas, ni aun borrar un pecado pequeño. Y, sin embargo, basta un pecado para mantener al ser humano alejado de Dios por la eternidad.

  A causa de un pecado. Adán y Eva fueron expulsados del jardín de Edén. A causa de un pecado. Moisés no pudo entrar en el país de la Promesa. A causa de un pecado, muchos sufrimientos se abatieron sobre la casa de David. Sólo el Hijo de Dios tiene el poder de quitar los pecados de los que creen en El y en su obra expiatoria. Por lo cual dice: "Yo deshice como una nube tus rebeliones, y como niebla tus pecados; vuélvete a mí, porque yo te redimí". (Isaias 44:22).- Si los seres humanos con lo efímeros que somos, hemos logrado tanto, cuanto mas El Señor Dios de todas las cosas puede hacer una nueva criatura de alguien de quien no se puede esperar nada.



“No me avergüenzo, porque yo sé a quién he creído”.

(2 Timoteo 1:12).-



“Sabemos que somos de Dios”. (1 Juan 5:19).-



“YO CONFÍO EN DIOS QUE SERA ASÍ” (HECHOS 27:25)



 Un hombre rico, culto, de elevada cuna. Fue llamado en las horas más dramáticas de la historia de su país. Sus consejos eran escuchados por los grandes de la tierra. Viajó por el mundo entero y las multitudes le colmaron de honores. Murió... mientras buscaba en un juego de naipes lo que se dio en llamar cierto día «el vislumbre de la esperanza».

 Se puede apretar fuertemente todo lo que el mundo ofrece: fortuna, honores, saber y poder, pero cuando la mano tenga que aflojar su apretón y relajarse por última vez, ¿qué es lo que quedará? Nada, nada para irse “por el camino de donde no se vuelve”, nada para la eternidad, nada que Dios acepte.

  El profeta Daniel, anciano ya y todavía cautivo en Babilonia, era más rico al final de su carrera que el poderoso monarca de los Caldeos. No necesitaba "tirar las cartas" para conocer el porvenir. Dios mismo le hablaba y le revelaba sus secretos del modo más conmovedor: “Daniel, varón muy amado, está atento a mis palabras que te hablaré” (Daniel 10:11).

  Mientras la nave que llevaba a Pablo hacia Roma era sacudida por la tempestad, al punto que se había perdido toda esperanza de salvación, el apóstol podía tranquilizar a sus compañeros de viaje y decirles: “Esta noche ha estado conmigo un ángel del Dios de quien soy y a quien sirvo, diciendo: Pablo, no temas... Dios te ha concedido todos los que navegan contigo… Yo confío en Dios que será así como se me ha dicho” (Hechos 27:23-25).

 “Nosotros también creemos, por lo cual también hablamos” (2 Corintios 4:13). Amigo, hermano que esta leyendo, ¿cree también usted lo que Dios dice? o ¿Tendrá que ir todavía a consultar a algún otro?.- Si ya le aceptó Jesús por fe en su corazón, su suerte esta echada y podrá decir con el Salmo 16:5 y 6: "Jehová es la porción de mi herencia y de mi copa; Tú sustentas mi suerte"."Las cuerdas me cayeron en lugares deleitosos, Y es hermosa la heredad que me ha tocado".



“¡Cuán difícil les es entrar en el reino de Dios, a los que confían en las riquezas!. . . Para los hombres es imposible, mas para Dios, no”. (Mareos 10:24 y 27).-



DOS ENCUENTROS CON JESÚS



 Los encuentros de Jesús con las almas, tales como nos son contados en los evangelios, tienen siempre sumo interés. El que nos es relatado en el evangelio de Marcos 10:17-22 es particularmente solemne.

 “Al salir él para seguir su camino, vino uno corriendo y se arrodilló ante El”. Ese hombre, aún joven, tenía grandes cualidades: era uno de los jefes del pueblo, temía a Dios y guardaba los mandamientos de la ley tanto como lo podía, honraba al Señor y reconocía a la vez su amor y su autoridad. Estaba lleno de buena voluntad y su sincero deseo era el de hacer lo necesario para heredar la vida eterna. Ya había hecho mucho y Jesús lo sabía. Pero el joven sentía que esto no era suficiente y preguntó: “¿Qué mas me falta?” (Mateo 19:20). Jesús le dice; “Aún te falta una cosa vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres... y ven, sígueme” (Lucas 18:22). El paso que debe dar es grande y el sacrificio elevado, porque el joven era muy rico. Se va; él guarda sus bienes... y con ellos su sed de paz, de felicidad y de vida. ¡Una fortuna y un corazón triste!

 Nosotros pecador: ¿queremos tener la vida eterna? Nos será otorgada gratuitamente si creemos en el Nombre del Hijo de Dios (1 Juan 5:13).

Creyentes: ¿queremos seguir a Jesús? Tenemos que revisar nuestro equipaje. El camino es angosto. El Maestro dirá en lo secreto lo que se debe abandonar. Hagámoslo para Su gloria y para nuestra propia dicha, por que nos sigue diciendo Jesús: “...De cierto os digo que no hay ninguno que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por causa de mi y del evangelio, que no reciba cien veces más ahora en este tiempo… y en el siglo venidero la vida eterna”. (Marcos 10:29-30).-

 Así como el joven rico. Saulo de Tarso tenía cualidades innegables. ¿No era él del linaje de Israel, de la tribu de Benjamín, fariseo, celoso de la religión de sus padres, y en cuanto a la justicia que es en la ley, irreprensible? (Filipenses 3:5-6). Había sido instruido a los pies de Gamaliel, un doctor de la ley honrado por todo el pueblo. Tenía, pues, un hermoso equipaje. Pero cuando Jesús lo detiene en el camino a Damasco para llamarlo a su servicio, Saulo calcula el gasto y no le asusta. Tiene que abandonarlo todo para recibir en cambio lágrimas, cadenas y tribulación. Pero Pablo no hará caso de su vida, ni la considerará preciosa con tal de que acabe su carrera y cumpla con su servicio. Lo deja todo sin vacilar. Al final de su vida, en una fría cárcel romana, no lamenta nada. Peleó la buena batalla, acabó la carrera y guardó la fe. Más allá del martirio que se acerca, el ve ya la corona de justicia que el Señor le dará (2 Timoteo 4:7-8).


 Vida llena, triunfante, empezada y terminada en el renunciamiento, todo al servicio del Maestro, quien le ama y se entregó por él, tal fue la vida de Pablo. La excelencia del conocimiento de Cristo Jesús había ganado su corazón y todas las cosas que el apóstol había abandonado por Jesús, Pablo las llama “basura”. Tiene el derecho de decirnos: “Sed imitadores de mí” (Filipenses 3:17).




“El aguijón de la muerte es el pecado... Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo”. (1 Corintios 15:56-57).-



EL AGUIJÓN



 Cierta vez, un apicultor mostró sus colmenas a uno de sus amigos, el cual era fotógrafo. —No te acerques tanto a las colmenas— le advirtió el apicultor a su amigo. Podrían picarte las abejas.

 —Pero ésta es precisamente la toma que necesito tener —contestó el fotógrafo, que andaba en busca de algo original. Puso manos a la obra. Mientras tomaba la fotografía, una abeja se asentó sobre su nariz y le picó. El fotógrafo dio un grito y se tomó la nariz, diciendo: —Tienes razón; hubiera tenido que ser más prudente.

 El apicultor le quitó el aguijón y le untó una pomada sobre la pequeña herida, al tiempo que le decía: —Cuando te pica una abeja, lo primero que debes hacer es quitar el aguijón. Si lo dejas adentro, queda también el veneno de la abeja y puedes tener grandes molestias.

 Ocurre lo mismo con el pecado en nuestras vidas. Satanás nos induce a pecar. Se nos advierte a menudo, como lo fue el fotógrafo, pero no hacemos caso. Realizamos lo que tenemos en mente. Cuando el diablo ha conseguido de nosotros lo que él quería, nos deja con un envenenado aguijón en nuestra vida. La herida se inflamará y nos dolerá, hasta que quitemos el aguijón; nos conviene hacerlo lo más pronto posible. Para ello, es necesario dirigirnos a Dios con la confesión de nuestro pecado. Entonces, El limpiará la herida y la sanará. “la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado...” “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados” (1 Juan 1:7 y 9).-




Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás. (Jn.6:35) 


EL QUE EN MI CREE



 Si queremos ser salvos tenemos que venir a Cristo, no hay otro camino de salvación bajo el cielo excepto venir a Cristo, primero dice "el que a mi viene..." ¿Que seria venir a Cristo?, implica abandonar todas las demás esperanzas vanas, las otras confianzas, venir a alguien es dejar y ausentarse de todo y todos los demás lugares y personas, ya no confiamos en nuestras obras, o en los santos, vírgenes o ídolos sea cualquiera su forma y moral, ya no confiamos en nuestro dinero, ni siquiera en nuestras fuerzas, cuando estas empiezan a fallar, confiamos en las fuerzas del Señor, "...porque en ningún otro hay salvación; porque no hay otro Nombre bajo el cielo dado a los hombres, en que podamos ser salvos..."

Resumiendo, ¿Estarías dispuesto a soltarte de todo para venir a Jesús? creer en El?, si no es así no hay nada mas que hablar pues el que no cree YA esta condenado, pues ha desechado el único remedio de Dios para todos los males del alma, no queda nada mas excepto oscuridad y densas tinieblas por los siglos eternos.-

Hay una universalidad tan hermosa en estas palabras, "El que a mi viene..." "El que en mi cree..." sea de la nacionalidad que sea, sea del estatus social que sea, sea de la raza que sea, no importa se eres un personaje muy lúgubre, de los que se tatúan y se visten de negro, no importa si eres muy raro, si tu pecado es mas negro que la negrura misma... Quizá digas o te dicen y ya hasta lo crees "Soy un bueno para nada..." Quizá diga alguien "Creo que he cometido el pecado imperdonable..." "Soy un apostata..." "No me siento apto todavía para venir a Jesús..."....

Jesús podría haber puesto alguna barrera, pero no puso ninguna "El que a mi viene, no le echo fuera..." Gloria a Dios!!! Gloria a Su Nombre Santo!!!

Hay quienes se avienen a las depresiones y algunos se vienen a los vicios y cuantas cosas incluso eligen el suicidio, cualquier cosa "eligen" pues no "encuentran" el Camino, y nosotros solemos decirles, "si tan solo pudieras creer..."

Miremos como la providencia misma, se entrega como el pan para nuestro hambre y para satisfacer la sed que no puede ser apagada ni con toda el agua de un Río de la Plata...

Tan solo creer, tan solo confiar en el Creador, porque Jesús es creador junto con el Padre y el Espíritu Santo, El dijo Yo (una persona) y El Padre (otra persona) UNO SOMOS, venir a Jesús en venir a Dios, y nadie viene al Padre si no es por El... "No temas, CREE solamente..." (Mar.5:36.-




"...puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios".  Heb.12:2.-


CONSUMADOR DE LA FE...





¿Quieres saber alma? ¿Cuando se decía y cuando se dijo con relevancia para nosotros CONSUMADO ES?... El oferente presentaba su ofrenda del ganado vacuno, ovejuno o caprino, macho de un año sin defecto, lo aceptaba como su ofrenda y sustituto haciendo transferencia de sus pecados, luego lo degollaba, lo desollaba, lo desguazaba, lo ponía sobre la leña encendida por sus partes y quedaba ardiendo hasta que solo quedaban cenizas, (cuando quedan solo cenizas ya no hay otro juicio que pueda pasar por ellas), entonces el oferente o sacerdote confirmaba que el holocausto estaba consumado... Lo mismo pasó virtualmente en el Calvario, todos esos sacrificios eran figura y tipo del Gran sacrificio de los siglos en Cristo Jesús, el tomo nuestro lugar, su sangre fue derramada gota a gota en dolores mucho mas profundos que las heridas corporales fue virtualmente cortado en pedazos y expuesto al fuego de la ira divina... permaneció en silencio, la gente gritaba cosas, permaneció en silencio, el silencio de la fogarata, el silencio de la victima desangrada, despojada de sus vestiduras, cortada en pedazos y puesta sobre el fuego... pecado tras pecado de la humanidad entera se concentran como arroyos de inmundicias provenientes de los recónditos confines para depositarse sobre aquel Gran Corazón, pero en vez de desbordarse eran absorbidos y fundidos, el Padre no pudo soportarlo, pero había un secreto que también el Padre sabía... Su santidad, la santidad del Cordero de Dios que quita el pecado del mundo... Todo el juicio del pecado fue sobre El, su fe siempre estuvo puesta en Dios, en el Padre, pero ahora el mismo Padre le da vuelta el rostro... Esto es muy santo, lo dejaremos como prefirieron hacerlo los Evangelistas "Eloi, Eloi, Lama Sabactani..."... y luego silencio, silencio, sigue ardiendo el fuego del holocausto... Que lo mantuvo?? Que lo mantiene?? Su fe, su esperanza y su Amor, Amor con mayúsculas... Su fe en Dios el Padre a pesar de que su santidad era inexpugnable, a pesar de su obediencia hasta la muerte, su fe a pesar de todos los bienes que hizo a los hombre, su fe a pesar de todas las enseñanzas vertidas, su fe a pesar de la soledad del Calvario viendo a María su madre, su familia según la carne destrozados de dolor, su fe a pesar de que de los doce que convivieron con El y participaron del pan y de la copa, uno le traiciona, el otro le niega y la mayoría huyen a esconderse... Su fe en la palabra porque "viendo que todo había sido cumplido..." lanza el gran grito de victoria: "CONSUMADO ES...", Padre esta consumado el sacrificio, ya no hace falta mas sacrificios de animalitos, (que no eran desangrados poco a poco El, sino degollados rápidamente...) Así el Cordero de Dios, se transformo para Su pueblo, en el Leon de la tribu de Judá, que ha vencido y su fe continua en Su corazón tan lozana como la eternidad misma...

Debemos poner los ojos en Jesús, solo en El, a pesar de que nuestro cielo sea como de bronce, a pesar de la enfermedad, a pesar de las incomprensiones de quienes nos rodean, aún en la Iglesia, a pesar de las situaciones económicas, que nuestra fe no se canse, que a pesar de tener todo en contra miremos al Consumador de nuestra fe, la cual ha de ser hallada en alabanza, ¿Alabanza de que?, ¿tendrá la fe alabanza estando sentado en un cómodo sillón viendo pasar los años, sin tener molestias?, No, ella ha de ser probada, prensada, sarandeada, goleada quizá por enfermedades o duelos de los mas crueles... pero miremos, contemplemos a Jesús el Autor y Consumador de la fe, que no te va a dar vuelta el rostro, ya lo sufrió El eso de parte del cielo, ahora por El, el cielo esta abierto y lo que dijo a un discípulo lo dice a todos los suyos: "...Yo he orado por ti, para que tu fe no falte..." (Luc.22:32). Amen y Amen Señor ayúdanos...



“¿Hasta cuando claudicaréis vosotros entre dos pensamientos? Si el Señor es Dios, seguidle”. (1 Reyes 18:21).-



OBSTÁCULOS PARA LA FE...



 Si usted que lee estas palabras aún no ha aceptado a Jesús como su Salvador, le pediría que sea franco consigo mismo. Que se pregunte qué es lo que le impide creer en Jesucristo y que escuche lo que la Palabra de Dios responde a sus argumentos:  ¿Piensa que es un pecador demasiado grande? - la Biblia dice: “Si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos” (Isaías 1:18). “La sangre de Jesucristo nos limpia de todo pecado” (1 Juan 1:7).

 ¿Temes ser rechazado? Jesús dice: “Al que a mí viene, no le echo fuera (Juan 6:37)

  ¿Quizá teme abandonar muchas cosas? Esa misma palabra proclama: “Qué aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su alma?” (Mateo 16:26).

  ¿Quizá lo detiene la inconsecuencia de los que dicen ser cristianos? Esta plasmado en la santa Escritura que “Cada uno de nosotros dará cuenta de sí a Dios” (Romanos 14:12).

  ¿O será que tiene demasiado buena opinión de sí mismo al comparase con los demás? Veamos este versículo: “No hay diferencia, por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios” (Romanos 3:23).

  ¿O también cree que debe hacer algo por su salvación?, la misma Palabra dice que no debemos hacer nada porque si nos estregamos a El estamos “Siendo justificados gratuitamente por su gracia” (Romanos 3:24). Por que: “Por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios” (Efesios 2:8).

  ¿Será por simple negligencia?.- Entonces responda sinceramente a esta otra pregunta: “Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande?” (Hebreos 2:3).-


“Tierra de Zabulón y tierra de Neftalí, camino del mar, al otro lado del Jordán, Galilea de los gentiles; el pueblo asentado en tinieblas vio gran luz; y a los asentados en región de sombra de muerte, luz les resplandeció”. (Mateo 4:15-16 e Isaías 9:1-2).-




“Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz”. (Isaías 9:6).-



Leer la Biblia en ISAIAS Capitulo 9 Versículos 1 al 7.-



  El capítulo 8 de Isaías terminaba con “tinieblas”. Israel andaba en ellas como ciego y a tientas. Pero, he aquí que, ante sus pasos, va a resplandecer “una gran luz”. La cita de este pasaje, hecha por el Señor en Mateo 4:15-16, nos transporta al tiempo del Evangelio para ver brillar en él a Aquel que es la luz del mundo (Juan 9:5).

  Y es en esa Galilea menospreciada (pero cuán privilegiada) que Jesús cumplió la mayor parte de su ministerio. No obstante, la luz verdadera no es sólo para una región o para un pueblo, sino que “alumbra a todo hombre”. Por desdicha. “los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas” (Juan 1:9 y 3:19). Nuestros versículos pasan por encima del tiempo del rechazamiento del Señor y por encima de todo el período actual de la Iglesia, la cual nunca se menciona en los profetas. Nos muestran de golpe el gozo de Israel en el momento en que, después de siglos de oscuridad, se levantará el glorioso Sol de Justicia para el reino milenial. El hermoso versículo 6 nos revela algunos de los nombres que se atribuyen al Hijo. ¡Tantos nombres como otros tantos benditos temas de meditación para nuestras almas!.-

"Porque tú quebraste su pesado yugo, y la vara de su hombro, y el cetro de su opresor, como en el día de Madián".


"Porque todo calzado que lleva el guerrero en el tumulto de la batalla, y todo manto revolcado en sangre, serán quemados, pasto del fuego". Isaías 9:4 y 5.- ¡Oohh!! cuando llega el "Príncipe de paz, culminan todas las violencias... Gloria a su Santísimo Nombre.-




"Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien".  Josué 1:8.-


PROSPERAR TU CAMINO



  "Hay camino que al hombre le parece derecho;  Pero su fin es camino de muerte". (Prov.14:12), hay un solo camino, "Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí". (Jn.14:6), ¿Cual es la prosperidad que buscas?, ¿quieres que "todo" te salga bien? A Josué se le ordena que la ley de Dios sea su gobierno. Se le manda meditar en ella día y noche para que pueda comprenderla. Por que cualesquiera que sean los asuntos del mundo que tengamos en mente, no debemos desechar la única cosa necesaria.- En Israel no había propiedades, había heredades y era llamada la "Heredad del Señor", ¿Conoces tu hermano, amigo, la herencia que tienes en Cristo?... ¿Que si recibieses una escritura de heredad de un país lejano, y te dijesen que esa escritura te pertenece por derecho de sangre?, ¿no te interesarías por sus anchos, y por todo lo que contiene y donde esta ubicada?, Si, por cierto, yo haría eso, y si estuviese en otro idioma, la traduciría, y estaría deseoso de llegar al lugar y ver la propiedad, estudiaría el como se me otorga el Derecho, quien pensó en mi para tener esa Declaratoria de Herederos, por cierto que hay quienes mueren con los títulos de propiedad estrujados contra su pecho pero no los han disfrutado, tienes que hacer prosperar tu camino, Ya tienes el derecho de posesión de esa Herencia, Cristo te adquirió el derecho, Cada vez que meditas en el Santo Libro, estarás haciendo prosperar tu paso peregrino en este bajo suelo y como Cristiano en el libro "El Peregrino", luego de que Fiel dio su vida por Jesús, "prosiguió su camino cantando: ¡Con que valor, oh Fiel, has profesado tu fe en Jesús, con quien serás bendito..."... Este Libro Santo es llamado la Espada del Espíritu... Jesús en el desierto luego de cuarenta días de ayuno, débil en su perfecta humanidad, porque "no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse..." tuvo hambre y el enemigo vino "con la palabra..." porque el diablo conoce la Escritura, pero en su extrema debilidad, el se defendió con los glorioso "Escrito está...", Quieres hacer prosperar tu camino y todo te salga bien. No voy a engañar a nadie, no esta diciendo que Ud. va a poner un negocio y "todo" le va a salir bien, porque aunque tenga la Biblia abierta en el escaparate no sería así, o las inversiones, o las propiedades terrenales registrables, porque Jesús lo expresó "En el mundo tendréis aflicción...", sino que serás prospero de camino hacia el trono, hacia la herencia de gloria en Cristo, hacia la entrega personal de buscar "primeramente el Reino de Dios y su justicia... porque vuestro Padre sabe de que cosas tenéis necesidad..." y cuando estés junto al trono, verás como fue prospero tu camino en especial en aquellos momentos en que has ido andando y llorando...



“Delante de las canas te levantarás, y honrarás el rostro del anciano, y de tu Dios tendrás temor”. (Levítico 19:32).-



RESPETO HACIA LOS ANCIANOS



 Viendo varias publicaciones de libros y en la web donde se publican cartas escritas por niños a sus abuelos, niños que provienen de distintos ambientes y que se manifiestan en los mas variados sentimientos de apego, de ternura y de candidez, lo cual constituye el atractivo de los escritos infantiles, me enternece profundamente. Pero a la vez, en estos días se sabe de muchos casos en que se maltrata a los adultos mayores de diferentes maneras, hay casos de abandono, de malas contestaciones, aún de maltratos psicológicos y físicos, y en gran porcentaje por parte del entorno familiar de hijos y nietos, (ni hablar de la inseguridad en que jóvenes "delincuentes..." por llamarlos de alguna manera, para robarles, los someten a vejaciones y aún a la muerte).- ¿Debemos clasificar esa actitud entre las anomalías psíquicas?. Así lo quisiéramos. Pero se debe reconocer que el mero hecho de que pensamientos monstruosos puedan venir a la mente de los adolescentes y jóvenes es una señal de los tiempos que estamos viviendo, en que habrá hombres "necios, desleales, sin afecto natural, implacables, sin misericordia;". (Romanos.1:31).- El espíritu de corrupción y de violencia gana rápidamente terreno.

  Nuestros padres contaban que hace de esto cincuenta o un poco mas de años se veía aún que los niños saludaban a personas ancianas desconocidas en la calle. ¿Se encuentra hoy esto?. Es algo muy común, escuchar que ya no hay respeto hacia los ancianos.

  Pero nosotros, aún los creyentes jóvenes, cuidémonos. Esa fatal tendencia puede influir también entre nosotros los cristianos. Cuando pensamos en los que nos precedieron en el camino de la fe. ¿los recordamos con todo el respeto que conviene?. La palabra nos dice: “Jóvenes, estad sujetos a los ancianos” (1 Pedro 5:5) (ancianos: personas que pueden dar un consejo por la experiencia y la sabiduría, puede ser que no tengan estudio universitario, pero han experimentado y su consejo es tanto o mas valioso que una "tesis"). El apóstol Pablo recomienda: “Los ancianos sean tenidos por dignos de doble honor, mayormente los que trabajan en predicar y enseñar” (1 Timoteo 5:17). ¿Seríamos de los que menosprecian el consejo de los ancianos y “piden el consejo solo de los jóvenes”? (véase 1 Reyes 12:1-15). El Señor nos ayude a escuchar lo que la gracia de Dios enseñó a nuestros ancianos y nos lo transmite por medio de ellos y no los dejemos olvidados, que el abandono es otra forma de violencia hacia ellos, que pueden estar rodeados de todas las comodidades y atenciones que se pueda tener, pero si sus hijos o nietos no los visitan, poseen una tristeza insondable.- Ocupémonos de ellos, esto es Doctrina Apostólica y Voluntad Divina... "No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará". (Gálatas 6:7).-

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“De oídas te había oído; mas ahora mis ojos te ven. Por tanto me aborrezco y me arrepiento”. (Job 42:5-6).-

¿SOLO IMPERFECTO O CULPABLE?



  El ser humano quisiera persuadirse de que sus faltas no son más que debilidades de un ser imperfecto, y que Dios puede acomodase a esas imperfecciones. El pecado del hombre, ¿en qué le perjudica a Dios? ¿Las buenas intenciones y los esfuerzos para comportarse mejor, no le bastan a Dios? El sabe de qué somos hechos y terminará por sacar algo bueno de esa criatura todavía moralmente incompleta.

  Así razonan tanto los notorios incrédulos que no se preocupan por Dios como mucha gente religiosa que busca su propia justicia. Pero éstos tan sólo son razonamientos del corazón humano, engañoso y orgulloso, aun, y sobre todo cuando se cree y afirma ser humilde.

 Job, el más justo de los hombres en su conducta exterior, extremadamente puesto a prueba en su cuerpo, deja escapar las secretas rebeldías de su corazón cuando está expuesto a la más terrible prueba: la de las sospechas de sus amigos. Piensa comportase tan bien como se le puede pedir a un mortal, de modo que Dios es injusto al probarle: hasta cree que saldrá “como oro” de la prueba. Sin embargo, se preocupa por saber "¿cómo se justifica el hombre ante Dios?..." No se considera un hombre incapaz de pecar, pero al mismo tiempo trata de excusarse: “Si he pecado, ¿qué puedo hacerte a ti?...”; “Tú sabes que no soy impío...”; “Hazme entender mi transgresión y mi pecado...”.

 Pero en el momento en que está finalmente colocado en la presencia de Dios mismo, se ve tal como es, no tan sólo imperfecto sino pecador culpable. Entonces la gracia de Dios le levanta, solo, sólo la gracia.

  No, el hombre no es un ser imperfecto, es un ser caído; no es un pecador justo a medias, sino tan sólo un pecador, por eso necesita de un Salvador, búsquele hoy mismo en oración sin tardarse mas.

21/10/2018

(porque por fe andamos, no por vista); (2° Cor.5:7)




ANDAR POR FE...



Pido al Señor me ayude respecto a la palabra, o sea el versículo de la fecha en el almanaque, por que aunque habla de la fe y casi todos sabemos lo que significa la fe, pero andar en fe no es de todos y quizá yo mismo no haya alcanzado ese grado de fe al que pretendo haber entendido y se que esta mas allá de mi entendimiento, y ojala pudiera alcanzar lo entendido...

Andar por fe, aunque Jesús la propuso en los Evangelios para la realización de cosas visibles, como sanidades y otros milagros como cuando ordeno secarse la higuera, en ese especial milagro, ante la sorpresa de los discípulos cuando le dijeron "Señor la higuera que maldijiste se secó..." El Señor les dijo "Tened fe en Dios..." (Mar.11:22).- Y cuando estaban amedrentados por el viento y la tempestad el Señor se sorprendió diciendo ¿Por qué estáis así amedrentados? ¿Cómo no tenéis fe? (Mar.4:40) y todo ello usando la fe para cosas temporales como un efecto cuasi secundario de una fe verdadera que busca lo eterno.- Pues hay quienes dicen tener fe solo para cosa temporales y viven sus vidas desordenadamente, viviendo por vista, se visten para que se los vea, y toda su vida esta basada en la vista y tenencia de cosas temporales, sus peticiones son solo temporales y creo no errar que si tuviesen suficiente fe para la multiplicación de panes y peces ya habrían establecido un comercio de ello.- La fe verdadera primero busca la santidad, (Como Jesús que es santo, ese es el ideal aunque usted y yo no la hayamos alcanzado), Segundo es una fe obediente y temerosa de Dios (Como Jesús que fue obediente hasta la muerte) Es una fe que ama como amo Abraham, padre de la fe como amo Jesús, para sumar, para abrazar...

El apóstol Pablo habla de andar por fe y no por vista en un contexto que va mas allá de la vida natural de esta tierra, comenzando esa sección de la Epístola diciendo "Porque sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, en los cielos..." Oh! Gloria, gloria, Gloria sea a Dios!!! que la soga o cadena que nos ata y nos hace estar firme no son cosas visibles ni temporales son promesas dadas por el Eterno teniendo este fortísimo consuelo como dice (Heb.6:19) "La cual tenemos como segura y firme ancla del alma, y que penetra hasta dentro del velo". Esa es la verdadera fe a mi entender, y debe ser puesta en practica en lo personal y en especial en la congregación. El lunes pasado tuvimos una reunión de Diáconos en Buenos Aires y un diácono contó un testimonio respecto a una necesidad muy grande y lo encomendó a la oración en conjunto de la Iglesia, la Iglesia en conjunto oro por esa petición y fue librado de esa necesidad, y recalcó el dicente: "Lo que es la oración de la la Iglesia, porque yo puedo estar turbado, mi oración puede tener estorbo, pero la oración de los santos es muchísimo mas eficaz..." La oración de la Iglesia no da gloria al hombre, la oración de la Iglesia cumple con la enseñanza del Salvador: "VOSOTROS pues oraréis así: Padre NUESTRO..." en plural, en unidad, en amor, en respeto el uno con el otro, esto es a mi sencillo entender la verdadera fe que alcanza el corazón de la omnipotencia... Ayúdame Señor a andar por fe y no por las vistas que pinte el enemigo, Amen.-



23/10/2018

"Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios". (Rom.10:17).-




LA PALABRA DE DIOS...



 Oir al Creador, es encontrar todo lo que necesitamos. Todo lo que oyó su voz, desde el sol, la luna, las estrellas, todo lo que fue creado por el, por haber oído la palabra, desde el principio en el Génesis esta la palabra escrita "Y dijo Dios..." y en todo lo que "dijo Dios..." tuvo y tiene su efecto, propósito y cumplimiento.-

 Dios hablaba con el hombre en el huerto del Eden, hasta que su interlocutor falto a la cita, como sucede hasta el día de hoy con un  muy alto porcentaje de los hijos de Adan que no congregan.

 El pecado nos ha atrofiado los sentidos espirituales por lo cual muchas veces no podemos oír la voz del Espíritu Santo de Dios, pero cuando logramos percibir esa voz, llegamos a sentir una alegría muy intensa porque nuestros corazones están preparados para la Verdad...

 La iglesia clama: "Oh, tú que habitas en los huertos,  Los compañeros escuchan tu voz;  Házmela oír..."  "Apresúrate, amado mío,  Y sé semejante al corzo, o al cervatillo,  Sobre las montañas de los aromas". (Cantares 8:13 y 14).-

 Porque el mandamiento, el primer mandamiento para los suyos es: "Oye Israel..." Deut.6:4.- Venir a oír la Palabra de Dios en las Congregaciones es el lugar ideal donde la fe se aviene, brilla y crece.

 Muchas personas desde aquellos alguaciles que fueron a prender a Jesús, volvieron sin haber cumplido la orden de apresarlo, les preguntaron: ¿Por que no habéis traído? ellos respondieron: "Jamás hombre ha hablado como este hombre..." Juan 7:46.-

 Es el poder manifestado en lo que para otros es locura, "La locura de la predicación...",

 Que siempre podamos ser bendecidos con varones valientes que se paren tras los púlpitos, hijos de los profetas, dones preciosos para la Iglesia a los cuales El Señor se digna de usarlos para multiplicar y aumentar la fe de las congregaciones...

 Esto quedo establecido con Moisés en el Sinaí cuando el pueblo de Dios huía despavorido por causa de la voz de Dios y pidieron a Moises "Habla tu con nosotros y escucharemos, pero que no hable Dios con nosotros, no sea que muramos..." Ex.20:19.-

 Que hermoso es cuando dejamos actuar esa palabra en nosotros, crea dentro nuestro cosas sagradas, gloriosas y sublimes, verdaderos cánticos de fe como lirios en los valles, como flores de loto en medio de los pantanos...



DÉJALO A DIOS ACTUAR (Por Pablo. R. Bedrossian) (1984)

 Déjalo a Dios actuar dentro de ti; ten fe; déjalo construir una vida mejor.

 Déjalo a Dios hacer un milagro en tu ser; déjalo estar en tu interior creando paz, dando amor.

 Déjalo actuar dentro de ti.

 Déjalo a Dios sembrar tanta belleza; dentro de tu alma crear un espacio para las sorpresas.

 Déjalo a Dios poner una aventura en tu ser; déjalo estar en tu interior creando paz, dando amor.

 Déjalo actuar dentro de ti.

24/10/2018

He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. 2º Tim.4:7


HE GUARDADO LA FE



Visto primeramente desde el punto de vista de guardar la fe en nuestro corazón para que no se deteriore y vengamos a menos, con insistencia hemos de buscar la oración, la lectura de la palabra, la meditación sobre ella, el ayuno, velar en oración, buscar su rostro,  y trabajar en la Obra de Cristo para que la fe no mengue en nosotros, sino que se valla acrecentando...

Por otro lado también significaría guardar el Evangelio, pues hemos sido bautizados en esta fe, guardar el testimonio y la doctrina de los apóstoles, ser celosos para que no nos deslicemos...

Mucho hay para decir, pero lo dejo a vuestras vigilantes meditaciones porque el diablo viene para hurtar, matar y destruir y cuando nos apaga la fe, podríamos caer en sus manos con un triste testimonio a no ser que haya una intervención Divina.-

Señor Jesús, ayúdame a seguir el ejemplo del apóstol Pablo, y al llegar al final de mi carrera pueda decir también, "He guardado la fe..." Amen.-


25/10/2018

"Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve". (Heb.11:1)


LA CERTEZA DE LO QUE SE ESPERA...





 "La Certeza...", la versión del RV 1909 dice "La Sustancia..." otras también han traducido "Es, pues, la fe la evidencia..."

 Una seguridad irrefutable en el corazón de lo que alguien ha preparado, es conocer a alguien predecible por sus comentarios, es saber algo muy dentro que aunque todo parezca nada, la fe se fija en aquella nube pequeña como la palma de la mano de un hombre..., ve por el Espíritu un niño pequeñito en brazos de su madre y dice "Ahora Señor despide a tu Siervo en paz porque han visto mis ojos tu salvación...", la fe ve un tierno brote incipiente brotar de la tierra desnuda y ve un gran árbol y lo riega y cuida todos los días...

El cristiano tiene esta seguridad desde la cruz del Calvario donde el Galileo de Nazaret, sello con su propia sangre todos los pactos y las promesas, semejante acto de amor, no deja lugar a duda de la voluntad del Padre, porque "Todo lo que pidiereis al Padre en Mi Nombre, creyendo lo recibiréis..."

 Un niño se sienta en un lugar pequeño y con unos papelitos simula dinero, coloca otros juguetes que simulan mercadería y en su imaginación se siente dueño de un gran almacén... No tiene aun el espacio físico, no posee la mercadería, y nada de lo necesario para desarrollar ese negocio que imagina, pero ya actúa como tal, ya tiene lo que se necesita, la sustancia de un comerciante esta dentro de el, y actúa de tal manera que donde vuelve su mirada ve productos para la venta, y el dinero que para otros son papelillos el los cuenta como reales... Oh!! Cuanto debemos aprender de los niños...!!. No estoy diciendo que se viva en un imaginario, pues la imaginación es un espejismo que nos lleva al fracaso y nos deja postrados en medio del desierto del desaliento, pero la fe afirmada en Cristo es algo muy diferente, hace florecer el desierto, es conocerlo a Dios por sus promesas, es saber que El tiene todo el Poder y que me ama con un amor inmutable, inalterable, que aunque yo sea infiel, El Permanece fiel, por si mismo, entonces si El lo prometió y no miente, El lo va a cumplir, tan así que esta escrito "Otros experimentaron vituperios y azotes, y a más de esto prisiones y cárceles".  "Fueron apedreados, aserrados, puestos a prueba, muertos a filo de espada; anduvieron de acá para allá cubiertos de pieles de ovejas y de cabras, pobres, angustiados, maltratados;"  "de los cuales el mundo no era digno; errando por los desiertos, por los montes, por las cuevas y por las cavernas de la tierra". (Heb.11:36-38).-

 Que este día pueda meditar que tan fuerte es mi certeza de las cosas que espero y sobre que cosas he puesto mi esperanza.- En que me estoy basando para recibir esto o aquello de parte de Dios, ¿será que lo estoy haciendo en mis obras?? El tiene que cumplir conmigo porque yo no anduve en borracheras y disoluciones? Será que estoy basando mi fe en que ando bien y tengo buen testimonio ante el Anciano Pastor o Congregación? Visito a los enfermos, soy generoso con limosnas y ofrendas?? Estaré basando mi fe en que hago esto o aquello, soy buen padre, buena madre, buen esposo, buena esposa??... Todo ello es y debería ser una consecuencia y demostración de mi fe (Sant.2:17), pero no puedo basar mi fe en mi buen comportamiento y he conocido muchos, y yo mismo incurrí en ese error de basar mi fe y tener una cierta certeza basada en mis obras... Mi fe debe estar basada en Cristo y solo en Cristo y por sus méritos en el Calvario y así de este modo nunca atribuiré al Señor despropósito alguno, porque por la fe entiendo que entre este corazón tan tembloroso y engañoso, y aquel grandioso corazón traspasado tan lleno de luz de fuerza y amor hay una conexión desde antes de la fundación del mundo, por ello es que podremos decir con toda certeza "He aquí, aunque él me matare, en él esperaré;..." (Job13:15).-



"Es ... la evidencia de las cosas que no se ven.” (Hebreos 11:1, Versión Inglesa.)

 "LA fé verdadera coloca su carta en el buzón del correo y la deja que marche. La desconfianza se detiene y duda si ha de recibir respuesta alguna. Tengo en mi mesa varias cartas que escribí hace algunas semanas; pero a causa de cierta duda sobre la dirección o el contenido, aún no las he echado al correo. Ni a mí ni a nadie aún han hecho bien alguno. Nunca harán nada hasta que me desprenda de ellas y las confíe al cartero y al correo.

 Esta es la forma como actúa la fé verdadera. Envía su caso a Dios, y entonces El obra. En el Salmo treinta y siete hay un magnífico versículo que dice: “Encomienda a Jehová tu camino, y espera en él; y él hará.” Pero El nunca obra hasta que nosotros encomendamos. La fé es un recibir, o mejor dicho, un tomar de los dones ofrecidos por Dios. Podemos creer, venir y encomendar, pero no nos daremos cuenta por completo de toda nuestra bendición hasta que empecemos a recibir y alcancemos la actitud de morar y tomar.—Days of Heaven upan Earth.

El Dr. Payson cuando joven, escribió de la forma siguiente a una madre anciana que estaba muy apesadumbrada a causa del estado de su hijo: “¿Vd. se impacienta y sufre demasiado acerca de él?. Una vez que Ud. ha orado por él, como ya lo ha hecho, y lo ha encomendado a Dios, ¿no debiera de cesar su inquietud acerca de él? El mandamiento, “No estéis afanosos por nada” no tiene límites; y lo mismo puede decirse de la expresión, “Echando toda vuestra solicitud en él.” ¿Si arrojamos nuestras cargas sobre otro, pueden continuar oprimiéndonos? Con respecto a mí mismo, yo he hecho esta prueba en mis oraciones; Si después de haber encomendado alguna cosa a Dios, puedo permanecer lo mismo que Ana madre de Samuel, sin dolores de cabeza y sin Inquietarme, sin sufrir dolores de corazón, entonces considero esto como una prueba de que he orado con fe; pero si continúo con la misma carga y pesar, entonces pienso que no he ejercitado mi fe.”

Manantiales en el Desierto - Abril 24

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